Ya sé que, con la mayoría de las series americanas ya volviendo del parón navideño en la emisión, no es un buen momento para recomendar otras series, pero no quería pasar la oportunidad de volver a insistir en la calidad que tiene, en mi opinión, Friday Night Lights. Actualmente se está emitiendo la tercera temporada en Estados Unidos, y estamos pendientes de si se produce el milagro en forma de cuarta temporada. En España, la emite la cadena de cable TNT, y por desgracia ninguna cadena más se ha animado a comprarla. A continuación repasamos los que, en mi opinión, son los mejores puntos a favor de la serie y las razones por las que creo que todo el mundo debería verla.
1. Porque no es otra serie teen
Si buscáis una serie de adolescentes, en la que lo más importante del capítulo sea quién se lía con quién, ya os digo de mano que ésta no es vuestra serie. Friday Night Lights va mucho más allá de todo eso. Sí, se centra en la vida de un equipo de fútbol americano adolescente, pero los temas que trata son mucho más reales. Tampoco esperéis una serie de fútbol americano porque, si bien es verdad que la historia gira en torno a los partidos, lo que importa aquí es el desarrollo de los personajes, cómo afrontan los problemas y cómo aprenden a vivir con ellos.
2. Porque es realista
Después de ver cualquier escena, te parecerá que el resto de las series son muy artificiales. Si por algo se caracteriza Friday Night Lights es por la naturalidad que tienen los actores y lo reales que parecen las escenas. ¿El motivo? Todos ellos tienen libertad a la hora de decir sus frases, con la posibilidad de eliminar las que no les parecen adecuadas a sus personajes. Además, el movimiento de los actores en pantalla no está preparado, y las escenas nunca se ensayan antes de grabarse. Es habitual ver a dos actores interrumpiéndose, a dos personajes hablando a la vez…
3. Porque no siempre hay finales felices
Además del realismo técnico, también hay realismo en las tramas. La serie no cuenta cómo un grupo de personas consiguen superar sus difíciles problemas y tener un final feliz, sino que nos muestra cómo tienen que aprender a la fuerza a vivir con ellos. Los personajes no siempre acaban como pretendían, no siempre consiguen recuperarse de las lesiones y no siempre consiguen ganar. Pero además, los problemas que les rodean son muchas veces más importantes que el deporte en sí.
4. Por la gran calidad de los actores
Con la libertad para la improvisación de la que disponen los actores, podríamos pensar que algunos de ellos no podrían estar a la altura. Nada más lejos de la realidad, y es que desde el primer actor hasta el último cumplen sobradamente su papel. Mención especial merecen los actores que dan vida al matrimonio Taylor, Kyle Chandler y Connie Britton. Verlos juntos en pantalla es toda una delicia.
5. Por la enorme calidad técnica
Además de calidad en el reparto, Friday Night Lights destaca por su estupendo equipo técnico. La dirección, los guiones, la fotografía, la iluminación… nada está dejado al azar en esta serie y cualquier escena destila calidad y realismo. Llama la atención lo genial que están rodadas las escenas de fútbol americano. Puedes no tener ni idea de ese deporte (como es mi caso), pero desde la serie se las arreglan para emocionarte e intrigarte de todas formas. Una muestra de lo bien que trabajan es el propio opening de Friday Night Lights, que también es, en mi opinión, uno de los mejores que he visto últimamente.
6. Porque aprenden de los errores
Tras una primera temporada espectacular, creo que todos esperábamos al menos que los nuevos episodios mantuvieran el nivel, pero no fue así. La inclusión de algunas tramas que encajaban más bien poco con el resto de la serie hizo que ésta recibiera las primeras críticas. No es que la segunda temporada fuera tremendamente mala, pero si peor de lo que estábamos acostumbrados a ver. Por suerte para nosotros, lejos de desanimarse y de desesperarse, los responsables de Friday Night Lights consiguieron revivir la serie haciendo prácticamente borrón y cuenta nueva. ¿El resultado? Una tercera temporada que, a falta de un capítulo para el final, está siendo también muy buena.
7. Porque, a pesar de la baja audiencia, van por la tercera temporada
Si otra serie cualquiera hubiera tenido audiencias tan discretas como Friday Night Lights en su primera temporada, seguramente no habría renovado, pero las buenas críticas hicieron que la NBC decidiera darle otra oportunidad. Lo mismo ocurrió tras el final de la segunda temporada, y es que la cadena buscó la forma de renovarla por todos los medios. Al final, y gracias a la plataforma de cable DirecTv, se llegó a un acuerdo para una tercera temporada de trece capítulos, que está actualmente en emisión. ¿Qué pasará ahora? El futuro, y salvo milagro, pinta bastante mal para la serie, pero al menos hemos disfrutado de tres geniales temporadas.
8. Porque no tiene nada que ver con la película
Si en su día vísteis la película de mismo título y no os gustó, os puedo asegurar que la serie tiene poco que ver y que además la supera con creces en calidad. Lo único que tienen en común es el fútbol americano como deporte y el hecho de que dos actores (John Aubrey y Connie Britton) aparecieron en su día en la película y también ahora en la serie. Si por la película descartásteis ver la versión para televisión, os recomiendo que al menos le déis una oportunidad al episodio piloto y enseguida os daréis cuenta de la gran diferencia entre ambas versiones.
9. Porque es una de las mejores series del momento
En definitiva, todas las razones anteriormente mencionadas nos llevan a la misma conclusión, y es que somos muchos los que creemos que Friday Night Lights es de lo mejorcito que se ha estrenado en la televisión americana últimamente. Es igual que no te guste el fútbol americano, tampoco es necesario que te interesen las historias de adolescentes, tan sólo tienes que darle una oportunidad al episodio piloto para convencerte de ello. Porque, de verdad, Friday Night Lights merece mucho la pena.
En ¡Vaya Tele! | Friday Night Lights vuelve por donde solía