No me gustaría valorar esta cuarta temporada de ‘Mad Men’ por su final, al fin y al cabo yo siempre he defendido que lo importante es el viaje y no su destino, pero inevitablemente ha quedado empañada por un último episodio demasiado precipitado. ‘Mad Men‘ se ha caracterizado siempre por su lentitud, su sutileza y por una forma de narrar los hechos basada en las miradas y el lenguaje corporal; no sé si es que a mí se me han escapado las señales, pero desde luego que este final no me lo esperaba venir.
‘Mad Men’ despidió el pasado domingo la que probablemente sea su mejor temporada, a pesar de su final. Todos los personajes avanzan de forma inevitable, unos mirando al futuro y otros sin poder dejar escapar su pasado, pero todos tienen algo nuevo que contar. Los hechos ocurridos al final de la tercera, tanto en lo profesional como en lo personal, han ayudado a la serie a eliminar líneas argumentales que ya empezaban a cansar, y a pesar de los personajes que se han quedado en el camino, los secundarios siguen siendo uno de los grandes pilares por los que la serie se hace grande.
Don Draper y sus crisis existenciales
La temporada pasada vimos cómo Don revelaba el secreto de su verdadera personalidad a Betty, y tras el divorcio del matrimonio, podría parecer que Don se sentiría más liberado. Nada más alejado de la realidad. Olvidábamos, pobres de nosotros, que más allá de la vida del actual Don Draper está la mujer y los amigos del verdadero Don, el único sitio donde Dick Whitman puede ser él mismo, experimentar libertad y hablar en primera persona. En definitiva, había una conexión con su pasado.
Con la muerte de Anna Draper a causa del cáncer, Don siente un vacío enorme en su interior. Recordemos que Anna era la única pieza que le unía a su pasado, la única persona con la que se sentía cómodo hablando abiertamente. Betty y Peter también conocen su secreto, pero no la historia completa ni los tintes emocionales implícitos en ella. Con Anna se va también el único resquicio de libertad que nuestro personaje principal encontraba en momentos de desasosiego; la escena final cuando se baña en la playa cerca de la casa de Anna lo deja bien claro.
Hasta ahora habíamos conocido las implicaciones sentimentales que este tema producía en Don, pero no nos habíamos parado a pensar en las legales. Cuando toda la compañía empieza a ser investigada fiscalmente por la contratación de una nueva cuenta, Don se sale de sus casillas, hasta el punto de renunciar a un cliente para evitar ser descubierto, sin pensar en los esfuerzos y en las necesidades de los demás (Pete en este caso) por puro egoísmo.
Esta parte de la trama ha servido para dejarnos clara la intensidad con la que Don se aferra al falso apellido Draper, pero también las elevadas cotas de egoísmo que es capaz de alcanzar por mantener cubierta su tapadera. Esta faceta no ha pillado a nadie por sorpresa, es evidente, pero a mí sí me ha dejado pasmado la poquísima consideración que tiene el personaje hacia sus allegados. Nunca he sido fan de Don, y nunca lo seré.
Secundarios de lujo
Y mientras Don me produce cierta indiferencia, los secundarios me tienen totalmente fascinado. Empezaré por Joan, que no ha podido evitar volver a caer en las redes de Roger, aun a pesar de estar comprometida y de que Sterling se las daba de “felizmente casado con su secretaria”. El tira y afloja que ambos han mantenido esta temporada ha sido de lo mejorcito, y el embarazo y posterior aborto (que finalmente no ha sido tal) ha dejado aún más claro el egoísmo y el desprecio de Roger hacia cualquier cosa que no le beneficie. Vamos, que son unas joyitas los socios de la empresa. Estoy deseando ver cómo reaccionará Sterling cuando vea que Joan echa barriguita y finalmente tiene el bebé. Ahí tenemos trama para rato.

Otra que ha quedado en estado de buena esperanza es Trudy, la mujer de Pete (hay que ver cómo convence esta chica en papeles dramáticos y a la vez en comedia con ‘Community’). Poco hemos avanzado sobre este tema en la temporada, pero sí hemos tenido varios momentos entre Pete y su suegro, cuya cuenta de Clearasil tuvo que abandonar por entrar en conflicto con la de Ponds, que daba más dinero a la empresa. Pero si me preguntáis a mí, el mejor momento de Pete se produjo en los primeros capítulos, cuando un intercambio de miradas con Peggy dejó claro que entre estos dos sigue habiendo algo; es una lástima que no exploten esta trama porque daría muchísimo juego.
Y los demás, a su rollo. Peggy sigue con sus dilemas de novios y pretendientes, que al final no van a parar a ningún sitio; confieso que Peggy es uno de mis personajes favoritos, pero sólo le encuentro atractivo en su relación con sus compañeros de la empresa, por lo demás me parece demasiado plana. Por su parte, Lane ha tenido poco protagonismo, y salvo por su “violento” padre, ha pasado sin pena ni gloria en estos capítulos. Cosgrove, Cooper, Crane y demás siguen siendo casi figurantes. ¿Dónde está Salvatore Romano cuando se le necesita?
Y al final acaba con la secretaría
Tres secretarias ha tenido Don este año; la primera, Allison, se le fue corriendo y llorando por los pasillos del edificio tras echar un polvo con ella; la segunda, la gran Miss Blankenship, se le murió encima del escritorio; y la tercera, Megan de recepción, ha acabado con un anillo en el dedo. Para que luego digan que las secretarias de Don son aburridas. Y aquí no han acabado los intereses amorosos del Don Juan; la Dra. Faye Miller se erigía como la pareja estable durante toda la temporada, y a ello hay que añadir las dudas cada vez más patentes de Betty; no sé si véis en ella lo mismo que yo, pero a mí me queda cada vez más claro que se arrepiente de haber dejado a su marido.

No es que el final de la temporada sea malo, a mí Megan me parece un personaje interesantísimo y va a ser divertido ver cómo llevan la vida en pareja estos dos y si él dejará de ser un infiel nato. Lo que no me ha gustado nada ha sido la forma de llegar al quid de la cuestión. La decisión de pedirle matrimonio me ha parecido demasiado exagerada, precipitada, forzada y muy impropia de una serie como ‘Mad Men’. Don Draper no es impulsivo, al menos no en las cosas que puedan tener trascendencia a largo plazo, y por muy perfecta que pueda ser Megan, no me creo para nada la actitud enamoradiza inmediata de Don. Quizá hubiera sido más interesante dejar la miel en los labios para rematarlo al comienzo de la quinta, pero este giro de trama es demasiado poco creíble.
Si os digo la verdad, esperaba otro tipo de final mucho menos sentimentalista. El capítulo 12 nos dejaba a la empresa al borde de la ruina tras la pérdida de American Tobacco, y a un Don despechado publicando una carta abierta contra las tabacaleras en el “Times”. Esperaba que este final se centrara en los recursos que utilizaría la empresa para recuperarse (se hablaba de que Disney podría ser la salvadora) al estilo de lo que tuvimos en la tercera temporada, pero en cambio han dejado esta trama casi al margen para centrarse en un cliffhanger final en forma de compromiso que sólo puedo definir con una palabra: decepción.

Pero como ya dije antes, no voy a dejar que esto me arruine una temporada brillante. Episodios como “The Beautiful Girls”, con Joan en pie de guerra y ese final de las chicas en el ascensor, o el maravilloso “The Suitcase” que se comieron entre Don y Peggy bien merecen una valoración alta de esta cuarta temporada. ¿Es mejor que las tres anteriores? Probablemente sí. ¿Sigue estando sobrevalorada? Probablemente también, pero eso no quita que ‘Mad Men’ se encuentre en otra dimensión narrativa y visual que todo el mundo debería disfrutar. Merecido o no, el cuarto Emmy para la serie está muy cerca.
En ¡Vaya Tele! | ‘Mad Men’, bienvenidos a Sterling Cooper Draper Pryce
Ver 30 comentarios
30 comentarios
cansadoyconfuso
El que un personaje te guste o no como persona es una cosa; puede ser un indeseable, pero un gran personaje ("The Sopranos" y "The Wire" ya nos lo demostraron antes). A mí, Don Draper me parece fascinante; un indeseable a menudo, pero fascinante. No es bidimensional.
A menudo vemos en esta serie un termostato de la evolución del género femenino: desde el ninguneo hasta su emancipación, ese recorrido que ejemplifica Peggy. Pero creo que prestamos poca atención a la crisis que se avecina sobre los modelos masculinos: y Draper la sufre. Sólo que la sufre desde la fachada de un tipo sumamente atractivo y "womanizer"... que, sin embargo, y pese a tirarse a todo lo que se menea, muestra una actitud respetuosa hacia las mujeres muy por encima de todos sus compañeros (no soporta chistes, burlas, faltas de educación).
¿A qué tipo de mujeres valora Don? A una artista independiente (Midget, en la primera temporada), a una emprendedora autosuficiente (Rachel, también en la primera), a Peggy, a la psicóloga de consumo (la doctora Miller)... ¿Pero está preparado para compartir toda su vida con ellas? No. Puede que le dé miedo... puede que no las vea capacitadas para cubrir una parte de él bastante complicada. ¿Qué parte? Sus hijos.
Hay una secuencia clave en este último capítulo: cuando a la niña se le cae el batido, y Megan, en vez de montar un espectáculo, le quita importancia. Es una cosa de niños, a los niños se les caen las bebidas. No hay que alarmarse. Y ahí Draper decide que Megan es la mujer que tiene que estar a su lado: y no creo que sea solamente como niñera... pero sí es una mujer que entiende a los niños. Curiosamente, y pese a su perfil testosterónico, y aplicando los parámetros de la época, Don es mejor padre, más atento, que Betty madre.
Totalmente de acuerdo con la importancia clave del personaje de Sally. Es la mujer del futuro: el paso siguiente a Peggy (y es genial que el hombre que despierta su sexualidad sea... Patrick McGoohan, "The Prisoner"; otro detalle de estilo). Sally es la (pre)mujer moderna.
¿Cierre precipitado de serie? Es posible. "Mad Men" lo hace a menudo. Es una serie impresionista, de pinceladas. Todas las temporadas "esprintan" en el último capítulo. ¿Mal capítulo? No. Es maravilloso, al menos en mi opinión.
Jimmy McNulty
¿De forma precipitada? ¡Madre mía! Creo que algunos no lo habéis pillado. Ha hecho lo de siempre, intentar encontrarse a si mismo, y al igual que Sterling, va corriendo a su secretaria. Ha sido una sorpresa, pero para nada ha sido precipitado.
En cuanto a esta temporada, ha sido perfecta. Todos los personajes han estado geniales, desde Peggy hasta la pequeña Sally. Por eso, no he de extrañarme al ver que le habéis puesto un 8, y encima os parece sobrevalorada. La temporada es de 9, o incluso de 10, y lo que esta es infravalorada, y no lo contrario. A cada cual sus gustos, pero ¿no hay ningún otro editor en este blog que pueda ver realmente la maravilla de esta serie? Porque es imposible que alguien le pueda gustar si no le cae bien Don, parece que se le este obligando a verla. Luego, para ponerle un 9 a Dexter si vais corriendo. Ahora, me mataran a negativos, pero es que no podía guardármelo.
288836
Pues a mi me ha parecido magistral, como casi toda la temporada. Ha sido una temporada llena de monólogos internos de Don a través de su diario, con sus consejos hacia si mismo, sus debilidades y reflexiones. La locura del matrimonio ha sido la sorpresa, pero de eso va Draper. Es un tipo que hace cosas aparentemente ilógicas que luego caen por su propio peso. A nadie se le ocurriría suplantar a otro que ha muerto, y lo hace por impulso, ni presentarse en la oficina de Sterling argumentando que en plena borrachera le dió una cita para entrevistarlo; y asi, miles de cosas. Es como sus frases para definir un producto, aparecen por arte de magia y sin ningún tipo de lógica, pero son perfectas desde el principio. Por otro lado, Faye le dice que solo disfruta del principio de las cosas, y tiene mucha razón. Es un adicto a la novedad y al reto, y eso se hace patente en casi todo lo que hace. Y bueno, mientras Don hablaba consigo mismo, las chicas se han aliado y han evolucionado a mejor, excepto Betty. Aunque ha enterrado el hacha de guerra con Don a final de la temporada, su nivel de neuroticismo ha aumentado a niveles insoportables tanto para ella como para los que le rodean. Dará mucho de si en breve. Al menos eso espero. Y el otro personaje enterrado ha sido Campbell. No ha molestado en toda la temporada. Es más, incluso ha sido de gran ayuda. Lo que los fans queremos es al Campbell egoista y trepa de la primera temporada.
RosePurpuraDelCairo
Imperdonable la ausencia de mención al mejor personaje de la temporada... Sally. Por la arrolladora interpretación de la cría, por su inusitada complejidad y porque a través de ella varios personajes a su alrededor adquieren nuevas dimensiones y se enriquecen aún más si cabe.
Por lo demás, de acuerdo en las líneas básicas de la crítica: en un tramo demasiado corto de la temporada, los acontecimientos han girado sobre sí mismos demasiado rápido.
http://roseistheword.wordpress.com/
noblot
Una temporada genial. Nuevos cambios, nuevos estilos narrativos, nuevas historias. Peggy es, sencillamente, uno de los puntos fuertes de la serie. Ha sido interesante ver su evolución profesional y personal. Imperdibles las escenas de Peggy y Don y la manera en que se ha ido desarrollando su relación en la serie. (The Suitcase, quizás el mejor episodio de la temporada) A través de Peggy en esta temporada se vislumbran los nuevos cambios que tienen lugar a mitad de la década. Sus nuevas amistades, la chica de Life Magazine, la fiesta donde le presentan a los beatniks y su propia ambición de triunfar en un mundo de hombres) Peggy Olsen a mi parecer es el mejor personaje de la serie y al que mejor le han desarrollado la trama, me atrevería a decir que es uno de los mejores personajes de la t.v. Elisabeth Moss perfecta en su papel, ya es hora de que le den su Emmy.
gigiamores
A mí me da la impresión que Don sólo quería una niñera para los hijos.
fringe
Puff y pensar que me quedé en el 1x01. No pude terminarla, no sé si será por mi edad, pero otras series de AMC marcadas por esa aparente 'lentitud' me parecen realmente joyas como Breaking Bad y Rubicon pero esta se me atraganta. Se que es demasiado precipitado hablar de una serie sólo por su piloto.
djalma
el matrimonio con la secretaria va a durar dos días, lo que tarde ella en aguantar que Draper llegue siempre tarde oliendo a perfume.
otra temporada estupenda, aunque me gustaría ver más de esos problemas por los que pasa la empresa, han salido del paso muy facilmente
310227
Para mí esta ha sido la mejor temporada de la serie. Es cierto que el último episodio de la serie no ha sido para nada el mejor, pero esta serie es especial hasta para eso. Yo en este último episodio personalmente he flipado con el momento de la llamada de teléfono de Faye. Creo que la posición de Faye es similar a la del espectador, que entra en shock con la repentina decisión de Don, gratuita y caprichosa a ojos ajenos, pero que para él y su futura esposa tiene todo el sentido del mundo. Esa rabia es similar a la nuestra cuando vemos a nuestro amado/odiado Don Draper volver a cagarla... ¿O no la habrá cagado? Al fin y al cabo Megan es uno de los personajes que mejor ha sabido llevarle, aceptando sus imperfecciones y dejándose seducir por ellas.
mr.series
Parece que muchos estamos de acuerdo en que esta temporada es la mejor de la serie. El nivel de cada capítulo fue tan alto, tan cerca de la perfección que creo que el último ha parecido peor de lo que en realidad ha sido. Aún así, da la sensación de que algo salió "mal" en este último capítulo, y no creo que sea tanto un problema de contenido, sino más bien de forma, o de ritmo. En cualquier caso, una pena tener que esperar tanto por la siguiente temporada de la serie, que junto a dexter (aunque esté en horas bajas), más nos hace disfrutar con cada capítulo. Para mi ya está a la altura de grandes como The Wire, Expediente X, Los Soprano...
roslin15
El mejor personaje secundario es Sterling en mi opinion, aunque quizá me dejó guiar porque creo que Slatery es el mejor actor de la serie con diferencia.
roslin15
¿pero qué os pasa con Romano? ¿Y Paul Kinsey? ¿nadie se acuerda de él? :( Y encima la vuelta de Cosgrove fue un pelín decepcionante. Ni un enfrentamiento con Pete tuvo.
pertrechado
Sally maduró esta temporada un monton, tambine opino que fue imperdonable que no la hayas nombrado, pero en lo demás muy de acuerdo, "The Suitvcase" y "The Beautiful Girls" fueron lso mejores capitulos, la serie se consolidó en esta temporada, esta mucho mas madura y tiene bien encaminados a los personajes, lastima que muchas tramas se pierden, pero siempre esta buneo que las retomen. Sal es alguien que se extraña mucho, terminaron su personaje MUY mal.
momoko-niikura
Tienes mucha razó!! ya se intuía que Don acabaría escogiendo a Megan tarde o temprano, pero no en el último capítulo! Lo miré y no podía creerme lo rápido que había transcurrido todo! Y, por favor, cómo en la quinta temporada no recuperen a Salvatore....argh! por lo menos que exploten la relación entre Penny y Cmpbell. Esta pareja, tal y cómo dices, puede dar mucho juego y ya sería hora que se sincerasen. Pero bueno, ya es de costumbre en la serie dejar las tramas en "stand by" durante tiempo...xD Sin duda, Joan, la mejor. Tengo ganas de ver el momento en que Roger se entere...El final ha sido precipitado, pero ha abierto el camino para una quinta temporada con bastante carne en el asador. A ver qué nos depara x)
ramis
A mi me parece la mejor temporada hasta la fecha de mad men.
Un apunte: sin quitar que Don es egoista (me cuesta pensar en un personaje de la serie que no lo sea) creo que mantener su tapadera a costa de clientes en ese capítulo en concreto no es "puro egoismo", como se dice en la crítica, sino "puro instinto de supervivencia". Además de usar la identidad de Draper para reinventarse a si mismo la utilizó para largarse de la guerra de Corea casi en el mismo avión en el que llegó y eso, como le dice a Pete, es deserción en tiempo de guerra.