La tercera temporada de 'Penny Dreadful' quiere entregarse de nuevo al terror

Canal+ Series organizó ayer un coloquio en Madrid con Paco Cabezas, director de cuatro de los cinco últimos episodios de la tercera temporada de 'Penny Dreadful', la serie de terror gótico de Showtime, y una de las cosas que comentó sobre su labor en la serie era que "he intentado traer el terror de vuelta". Uno de los asistentes comentaba que, desde los dos primeros episodios dirigidos por J.A. Bayona, 'Penny Dreadful' se había contenido mucho en entregarse a los códigos del género, optando por un aire más teatral y literario, y la situación parece haberse revertido en la tercera temporada.

Cabezas destacó en el encuentro que "estoy muy conectado con John Logan, el showrunner de 'Penny Dreadful'. Sobre todo, en el tipo de sensibilidad que ambos tenemos alrededor de la serie", y que su labor era buscar la manera de que lo que Logan había escrito diera más miedo. Sobre todo porque esta primera mitad de la temporada hace algo que la serie no había hecho hasta ahora, como es acabar buena parte de sus capítulos en cliffhangers y revelaciones.

Los nuevos villanos de 'Penny Dreadful'

Después de luchar contra un malvado espíritu primordial y contra unas brujas enviadas por el mismísimo Satanás, los protagonistas de 'Penny Dreadful' tienen ahora tres frentes abiertos. Por un lado, Hécate, la única de las brujas supervivientes, quiere convencer a Ethan para que se entregue a Lucifer y contribuya a traer una era de oscuridad a la Tierra. Por el otro, Vanessa Ives empieza a ser atraída a la esfera de Drácula y, todavía desconectados del resto de la acción, Lily y Dorian pretenden dominar el mundo a su manera.

Estos últimos se desvelaron como potenciales villanos ya al final de la segunda temporada, pero sus planes están tomando forma muy poco a poco. Lily (y su intérprete, Billie Piper) ha crecido enormemente en estos primeros cinco capítulos. Quiere traer su propia justicia al mundo, quitando de enmedio a todos esos hombres ricos victorianos que se creen con derecho a pagar para ver cómo matan salvajemente, delante de sus narices, a una chica, y no parece que ese enamoramiento casi infantil del doctor Frankenstein vaya a impedírselo.

Frankenstein está representando al héroe romántico por antonomasia, atormentado por su amor hacia alguien inalcanzable, y lo interesante es ver su relación con su nuevo aliado en su intento por "curar" a Lily, el doctor Jekyll. Éste no se transforma en Mr. Hyde de momento (su dualidad viene por su cualidad de ser mitad británico, mitad indio), pero sí trabaja buscando tratamientos para las "bestias" que todos llevamos dentro. Los busca en uno de esos "bonitos" psiquiátricos decimonónicos que nos han dejado uno de los mejores episodios de lo que llevamos de año.

El show de Eva Green

Ese capítulo es el cuarto, 'A blade of grass', que transcurre enteramente en una sesión de hipnosis a la que Vanessa Ives se somete para ver quién es ese nuevo demonio que quiere poseerla, y que ya se presentó ante ella cuando estuvo encerrada en una clínica psiquiátrica, poco después de que traicionara a su amiga Mina. Es un episodio sólo con tres actores; Patti LuPone, Rory Kinnear y Eva Green, y los dos últimos dan un verdadero recital.

Kinnear (cuyo personaje está explorando los recuerdos qie tiene de su vida anterior a ser la Criatura) alterna entre el compasivo celador que le lleva la comida a Vanessa y los dos demonios que pelean por su alma, Lucifer y Drácula, y ofrece un contrapunto mucho más contenido y naturalista a la fuerza de la naturaleza que es Green, que se entrega por completo al sufrimiento de Vanessa ante los bárbaros tratamientos psiquiátricos y a su resistencia a los intentos de los demonios por atraerla hacia ellos.

En el coloquio organizado por Canal+ Series, Paco Cabezas explicó, por ejemplo, que "tanto Tim (Timothy Dalton) como Eva (Eva Green) han sido un regalo. La elegancia de Tim, su saber estar... me encantaría trabajar con él otra vez. Respecto a Eva, ha hecho un trabajo maravilloso. Se merece un Emmy, todos los premios del mundo, es perfecta en cada toma, un prodigio". En todas las temporadas de 'Penny Dreadful', John Logan incluye un capítulo dedicado a Vanessa, y este 'A blade of grass' eleva enormemente el calado emocional del personaje, al que vemos mucho más frágil de lo que estábamos acostumbrados.

La entrada en escena de Drácula, de ese Drácula que se disfraza del amable doctor Sweet para acercarse a la señorita Ives, ha permitido, además, que 'Penny Dreadful' hasta tomara prestado el esquema epistolar del libro de Bram Stoker para iniciar su temporada, mostrando las cartas y telegramas que Vanessa y Sir Malcolm se envían mientras él está en África.

La separación de personajes sienta bien

La tercera temporada ha separado físicamente a sus personajes, enviándolos a cada uno a un confín del mundo, y esa separación no ha hecho que la serie se resienta. Para un personaje como Ethan Chandler, de hecho, ha sido una buena idea que lo arrastren de vuelta a casa, a Nuevo México, para enfrentarse a ese padre al que odia. El escenario (construido en el desierto almeriense de Tabernas) le ha permitido a 'Penny Dreadful' adentrarse en el terreno del western y ayudarnos a comprender un poco mejor no sólo a Ethan, si no porque puede verse tentado por abrazar el mal y la oscuridad que le propone la bruja Hécate.

La resolución de esa trama se queda en suspenso al final del quinto capítulo. ¿Conseguirá Sir Malcolm evitar que Ethan acabe como siervo de Lucifer, o muerto a manos de su padre? En la segunda temporada vimos que sólo la unión de Ethan y Vanessa puede acabar con todas esas criaturas de la noche que quieren arrasar el mundo, pero ambos están demasiado asustados de ser quienes son en realidad.

'Penny Dreadful' no hace demasiado ruido en los premios (excepto por los Critics' Choice) y que se emita en mayo y junio la deja en una tierra de nadie un poco extraña para los medios, pero esta tercera temporada está presentando un conjunto mucho más cohesionado (incluso aunque sus personajes estén separados), está encontrando nuevas cosas que hacer con la Criatura y su búsqueda de quién era antes de que Frankenstein lo resucitara y sigue teniendo un impresionante activo en Eva Green y Vanessa Ives. John Logan ha prometido un "ajuste de cuentas", y apunta a que ser mucho más intenso de lo habitual.

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