Kyle XY fue una de las series que mejor le funcionó a Cuatro en 2007. Emitió de una tacada la primera temporada, que fue todo un éxito inesperado en su estreno en Estados Unidos, y los primeros capítulos de la segunda, y paró la emisión en el cliffhanger que, en ABC Family, marcaba el final de la temporada de verano. El canal retomó los siguientes episodios en enero (algo bastante habitual en los canales por cable estadounidenses), pero en Cuatro ha pasado un año desde que sus seguidores se quedaron con la última imagen de Jessi saltando desde una catarata.
Finalmente, y después de que se vieran primero en Sci Fi España, los episodios finales de la segunda temporada se estrenarán el próximo domingo a las 21:30, ocupando el hueco que deja libre el ya finalizado Pekín Express. En ellos, Kyle intentará averiguar qué ha sido de Jessi y cuál es la verdadera naturaleza de la conexión que comparten, al mismo tiempo que quiere ser un chico normal. Por su parte, que los secretos de Kyle se vayan desvelando no hará más que aumentar la tensión y el riesgo sobre la familia Trager. Para mí, sin embargo, Kyle XY ha perdido la gracia que tenía al principio.
Lógicamente, ir descubriendo el mundo con Kyle en la primera temporada, a la vez que se desvelaba poco a poco el misterio de su identidad, era muy entretenido y resultaba una idea refrescante. Incluso le confería un toque algo distinto a las clásicas tramas de las series familiares con hijos adolescentes. Sin embargo, conforme entramos en la segunda temporada, las historias de la familia se fueron haciendo cada vez más convencionales y la trama sobre el origen de Kyle se complicó con una misteriosa y todopoderosa compañía y la aparición de Jessi YY XX, que derivaron en una conspiración a lo Alias poco lograda.
De todos modos, en EE.UU. sigue funcionando razonablemente bien y, de hecho, la tercera temporada empezará allí el próximo 12 de enero. Las reposiciones que Cuatro hizo de los primeros capítulos en verano no tuvieron el seguimiento en audiencia esperado, pero quizás eso cambie con el estreno de los nuevos episodios. Eso sí, enfrente va a tener pesos tan pesados como Aída o el cine de La 1.
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