Y vaya final que se ha marcado 'Succession'. La serie de HBO se ha despedido y nos ha regalado unos casi noventa minutos que nos ha tenido en vilo con la jugada final entre los Roy, Waystar y el GoJo de Lukas Matsson. Muchos nervios para que, ya terminando, se responda la gran pregunta: ¿quién será coronado sucesor del emporio?
Por supuesto, a partir de aquí spoilers del final de temporada.
La respuesta es Tom Wambsgans (Matthew MacFayden) después de que el intento a la desesperada de Kendall (Jeremy Strong) y Roman (Kieran Culkin) quedase frustrado a última hora. La empresa es vendida y él es el nuevo CEO.
Una decisión de guion que, si bien podría ser algo frustrante para los que esperábamos que alguno de los hermanos fuese coronado, no carece de una gran lógica. Tom no solo es el tipo que "siempre ha estado ahí" sino que ya en el final de la temporada 3 con su traición demostró la pasta de la que estaba hecho y que haría de todo por trepar en la escala.
Según explica Jesse Armstrong en el "Detrás del episodio" de esta semana:
«La idea en torno a Tom siendo el sucesor final es algo que llevaba pensando desde hace tiempo como el final correcto. Incluso si, digamos, no es el monarca más poderoso que conozcas. Su poder viene de Matsson. Esos tipos que van hacia arriba y se ofrecen a la gente poderosa están por ahí.»
O, como bien le vende Shiv a Lukas, lo bueno de Tom es que «comería la polla más grande de la sala.» Hablando de Shiv, Mark Mylod, director de la serie, asegura que han trabajado en torno a esa idea de que el personaje interpretado por Sarah Snook iba a «sabotearse a sí misma y sabotear el acuerdo.»
Qué ha sido de los tres "mosquetroys"
Eso sí, ella sale la mejor parada de todos, o al menos, la que "menos" ha perdido. Si bien una vez resuelto el tema de la sucesión en Waystar hace que los personajes, en palabras de Jesse Armstrong, pierdan su interés. Según él, todo esto ha marcado a cada uno de los Roy de una manera permanente, a pesar de que cada uno está en un sitio emocional diferente:
«De un modo reduccionista y brutal, Roman acaba exactamente donde empezó. Es todavía ese tipo. Y quizás podría haber sido un playboy idiota con algunos instintos algo asquerosos y algunas bromas divertidas. Podría quedarse en un bar siendo ese tipo y esto ha sido un rodeo en su vida.
Diría que Shiv todavía está en juego, en un lugar aterrador, frío y emocionalmente estéril. Pero ha tenido este tipo de ni victoria ni derrota. Es decir, va a haber movimiento. Queda todavía mucho de partido que jugar, pero ahí es donde lo dejamos y parece que va a serles difícil progresar emocionalmente dadas las cosas que se han dicho el uno al otro.
Para Kendall, esto nunca dejará de ser el evento central de su vida, los días centrales de su vida, el par de años centrales de su vida. Quizás podría ir y montar una compañía... pero las posibilidades de de alcanzar el estatus corporativo que papá consiguió son muy bajas y creo que eso le marcará toda su vida.»
La teoría del beisbol
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Por cierto, antes del episodio empezó a circular un vídeo que intentaba discernir si los nombres de los protagonistas podían ser una pista respecto al final de 'Succession'.
En concreto se centró en el apellido de Tom como referencia a Bill Wambsgans, jugador de beisbol (del Cleveland) con una proeza bastante rara en su haber: lograr lo que se llama un triple play sin asistencia en una serie mundial. La única vez, de hecho, algo análogo a lo que habría hecho Tom en este final de serie.
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