Se establece como un reto complicado tener que definir una comedia de veinte minutos cuando solo hemos podido ver su primer episodio. Esto es lo que ocurre si tenemos que hablar de ‘Go on’, la nueva comedia de la NBC para la próxima temporada, que ha sido presentada a la audiencia esta semana aprovechando el tirón de la emisión de los Juegos Olímpicos. El capítulo piloto ha tenido unas audiencias aceptables, el mismo adjetivo que podríamos utilizar para realizar una primera valoración de lo que ha supuesto la vuelta de Matthew Perry a la pequeña pantalla.
El primer episodio de ‘Go on‘ nos hace retomar la creencia de la escasa dificultad que parece tener que el piloto de una comedia se deje ver. Parece como si cualquier guionista pudiera diseñar una simpática historia en veinte minutos para que los espectadores pasen un rato entretenido frente a la televisión. De eso sabe mucho el primer capítulo de ‘Go on’, que arranca su aventura ofreciéndonos una historia correcta y entretenida, pero que se olvida de un aspecto importante en eso de imponerse frente al resto de series en el futuro: el riesgo.
‘Go on’ nos narra la vida de Ryan King (Matthew Perry), un exitoso presentador de radio al frente de un programa deportivo que debe superar la reciente muerte de su mujer. Para ello acude a un grupo de apoyo, donde tendrá que lidiar con todo tipo de personajes a la vez que ellos deben soportar la excéntrica personalidad de Kyng. Sin duda, uno de los mejores momentos que nos ha ofrecido el episodio de arranque ha sido ese primer contacto entre Ryan King y el grupo de apoyo al que debe acudir. La escena en la que todos compiten por ver quien tiene la peor experiencia hace que ‘Go on’ nos gane, al menos para el resto del episodio.
El problema que le surge a ‘Go on’ es la incertidumbre que nos provoca al pensar en lo que está por venir. La historia de Kyng funciona, pero quizá solo funciona para un episodio y no para un temporada entera. Nunca he sido partidario de valorar las ficción haciendo hipótesis sobre su futuro, así que de cara a septiembre le seguiré la pista a la comedia y a lo que tengan que ofrecernos. Acepto que ‘Go on’ me ha convencido, aunque también soy consciente de que la historia que nos presentan carece de solidez, sobre todo si no conocemos cómo van a ser sus siguientes episodios (si cada uno está centrando en el problema de un personaje secundario, por ejemplo).
La ficción puede distinguirse del resto en esos toques de drama tan presentes a lo largo de todo el primer episodio, poco habituales hoy en día en una comedia de tan escasa duración. En realidad, la historia nos presenta a unos personajes que tienen que superar experiencias duras que han sucedido recientemente en sus vidas. Normalmente esos conflictos están manejados con un tono cómico, pero en ningún momento ‘Go on’ esconde su voluntad de querer enternecernos, en ocasiones con acierto.
En una época en la que decenas de series compiten por conseguir un hueco en nuestras vidas, ‘Go on’ lo tiene difícil, sobre todo si pretende seguir en la línea de lo políticamente correcto y no es capaz de ir más allá. Repito que lo que he visto hasta ahora no es malo, pero dista muchísimo de la novedad que algunos esperamos ver en un nuevo producto de ficción. Si lo que la NBC pretendía estrenando ‘Go on’ en agosto era causar expectación, conmigo lo ha conseguido, aunque si yo tuviera que apostar sobre su futuro haría como los creadores de la comedia han hecho con la serie e iría a por lo seguro, afirmando que ‘Go on’ pasará este año por la parrilla estadounidense sin pena ni gloria.
En ¡Vaya tele! | ‘Go on’, nueva serie de la NBC para la próxima temporada con Matthew Perry de protagonista