Fue una de las dudas que me surgió mientras veía el primero de los dos capítulos de El caso Wanninkhof: ¿Cómo era posible que la familia no hubiese hecho nada por impedir la grabación de una miniserie así, cuando su imagen no salía bien parada y, sobre todo, cuando deberían haber salido escarmentados del uso que los medios de comunicación hicieron del asesinato de su hija?
Pues nada, ya tenemos respuesta. La madre de Rocío Wanninkhof, Alicia Hornos, presentará en septiembre una demanda contra TVE por considerar que parte de la miniserie hija atenta contra el derecho al honor y perjudica la imagen de la familia. Curiosamente, es lo que parecía más nimio de toda la serie lo que ha molestado a la familia.
En concreto, lo que no ha gustado es la historia sexual de Rocío con su novio, que salía al comienzo de la serie. No veo yo en qué puede perjudicar esas imágenes al honor de la familia, o, sobre todo, no entiendo por qué les molesta algo tan accesorio. La miniserie, ponía el dedo en la llaga al mostrar cómo la familia contribuyó al linchamiento moral de la acusada Dolores Vázquez, que llegó a ser condenada por el asesinato, aunque finalmente el juicio fue declarado nulo.
El abogado de la familia insiste en que la demanda "será sólo por eso". Es decir, que por el tono de folletín y del uso estereotipado de los personajes no se sienten perjudicados.
En ¡Vaya Tele! | El caso Wanninkhos exprime la gallina de los huevos de oro