Yo soy Bea es, sin lugar a dudas, el proyecto más rentable de los últimos años. El éxito que ha cosechado la serie con el poco presupuesto que tiene hacen que sea el proyecto español que mejor ha salido desde hace mucho tiempo. Todas la cifras y datos ya los conocemos de sobra, pero lo que ahora nos interesa más son otras cosas como ¿Por que tiene tanto éxito? ¿Cual es la clave de tener tanta audiencia pese a ser una historia ya conocida (al menos a priori)?
La contestación a estas preguntas requiere quizás un poco de reflexión. Habría que pensar en primer lugar cómo nació la serie, como una versión nacional de una historia conocida ya, la de Betty la Fea, que cosechó éxitos allá por donde se estrenó, incluida España. Debido a esto, los espectadores tenían un precedente por el que podían sentir curiosidad por ver cómo se versionaba en España esa historia y qué actores y actrices iban a aparecer. Lo segundo que tenemos que tener en cuenta es la hora en la que se emitió en un principio, en la hora típica de toda telenovela que se precie, con lo que llegar al target de telespectadores estaba bastante conseguido ya desde un principio, y más emitiéndose en Telecinco.
Pero claro, estas razones no son suficientes para conseguir los datos aplastantes que lleva teniendo la telenovela en los dos años que lleva en antena por lo que ¿cual es la razón exacta de su éxito? Yo, y esto es una opinión muy personal de alguien que no se considera experto en analizar las audiencias, creo que es por la simplicidad del argumento. Yo soy Bea es una serie muy fácil de ver, la puedes coger empezada y te enteras de todo en pocos minutos y, lo que es más importante, la serie tiene personajes con los que muchos espectadores se pueden identificar fácilmente al ser estereotipos bastante básicos y generales que pululan por toda la geografía española.
¿Hasta cuándo seguirá Bea arrollando en audiencias? Creo que eso es algo que nadie puede decir, pero quizás los guionistas deberían volver a encaminar el guión a su historia principal y dejar ya finalizadas todas las subtramas que se han inventado, porque puede ser que el público se canse tan rápido como se enganchó de la serie al ver que no avanza en nada su argumento. Pero bueno, únicamente el tiempo dirá si Bea sigue siendo la segunda gallina de los huevos de oro de Telecinco o se convierte en el patito feo.
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