La vuelta de 'Aída' no ha sentado tan bien a la parrilla del domingo como se pensaba en un principio. Es cierto que la ficción ya se encontraba muy lejos de los datos que conseguía en sus primeras temporadas, pero la pérdida de audiencia que está logrando con el estreno de sus nuevos capítulos pone en evidencia que la serie ya no tiene la fuerza para competir como demostró antaño. Y, mientras se espera una remontada, el último episodio estrenado ha bajado de la barrera de los dos millones y medio de espectadores, una cifra a la que suelen superar los estrenos de cine de otras ofertas.
Con su regreso, la comedia de Telecinco ha dejado en evidencia que no cuenta con la frescura necesaria para seguir sorprendiendo al público, ya que sus episodios se emiten como una sucesión de historias donde da la sensación de que todo lo mostrado ya se ha repetido alguna que otra vez antes. A estas alturas, las tramas de 'Aída' no logran aportar frescura y el desarrollo de sus episodios no se alejan de todo lo que ya se ha explotado en el pasado, dando la sensación de que la ficción no ha sabido evolucionar con el tiempo. A esto no ayuda la emisión orquestada por Telecinco, que ha deteriorado la imagen actual de una de las comedias que más éxitos ha dado a su parrilla.
Esa continuación de episodios y la decisión de dejar de emitir sin llegar al final de las temporadas han dañado la imagen de la ficción ante los espectadores, que, tras más de 200 episodios, no ha podido evitar el desgaste del tiempo. Hoy, nos encontramos ante una serie donde los personajes están muy viciados, repiten constantemente sus chistes y la estructura de las bromas que realizan y el desarrollo de las tramas no consiguen aportar frescura. Por eso, aunque los personajes se enfrenten a diferentes situaciones, no podemos evitar sentir que ya hemos asistido a lo que nos enseñan y pone en evidencia que 'Aída' debería tomar algún que otro riesgo si quiere sorprender entre la audiencia.
En la actualidad, la comedia se presenta solo para un grupo de incondicionales, que se encuentran rendidos ante su peculiar humor y que sí obtienen esa dosis necesaria para terminar la semana con una sonrisa. Pero como digo, ya no es recibida con el mismo entusiasmo de antes, entre otras cosas porque se ha quedado estancada en lo que fueron los puntos fuertes del pasado. La relación entre Chema y Soraya, la extrema personalidad de Mauricio o las continuas paridas de Luisma son algunos de los puntos que más desgastados se encuentran, ya que la ficción sigue apoyándose en sus protagonistas principales pese a que en la última temporada se decidió aumentar el peso de algunos secundarios en el desarrollo de las tramas.
Estos personajes siguen estando a la sombra del resto, pese a que sus historias comienzan a cansar. Habría sido una buena decisión que adquirieran mayor peso en el desarrollo de los episodios, centrando sus propias tramas y dejando atrás el papel de secundarios de lujo de quienes causaron furor en el pasado. Pese a esto, 'Aída' demuestra que es capaz de sacarle jugo a la continua aparición de caras conocidas que vemos en pantalla. Ayer fue el turno de Jesús Vázquez y Macarena Berlín, dos personajes que se adaptaron bien a las tramas de la serie, aportaron algo de novedad y devolvió algo de la frescura perdida. Lástima que con el resto no podamos decir lo mismo.
En ¡Vaya tele! | Lo mejor de 'Aída' en su capítulo 200 | FesTVal 2013
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13 comentarios
robhouse
Mojón
cachalote_guay
A mí es que nunca me ha hecho gracia, jamás.
Han tirado de topicazos y corta pegas de otras sitcoms de éxito y ale, ahí tenéis la chapuza patria a la que nos tienen acostumbrados.
dgimeno84
¿Repetir los mismos chistes? ¿En Aída? No. Se llevan repitiendo los mismos chistes desde 7 vidas. Desde sus primeras temporadas tenemos el mismo chiste del "Eres muy.... hmmm... muuuy... hmmm muuy..." y le pasa la pelota a otro. Y nunca tuvo gracia. Hasta las narices de que cada vez que hablan por telefono les acaben colgando y terminen con un "Oiga? OIGA!? Me ha colgao!"
Dani
Fue a raiz de cierto capítulo que cambiaron los guionistas creo, y se noto MUCHO. De capítulos en condiciones, de repente un capitulo malo tirando a mediocre. Fue a partir de entonces que veia los capítulos de vez en cuando si me pillaban, hasta ahora, que no los veo.
Cero innovación, explotando lo más explotado de cada personaje. Han transformado la personalidad de los personajes a una uni-dimensional.
Y mejor ni hablo de la SOSAINA de Ainhoa (Manuela Velasco), de la cual no me creo el personaje y solo veo a una tía actuando; o de "La Junca" (María Díaz), y de como fuerza el personaje hasta limites desagradables para el espectador.
PD: Me olvidé mencionar a Aidita.... UFFF....
Willy
Comparar Aída con Cuentame es un delito tipificado en el codigo penal.
iteisaburo
Nunca me hizo ni pizca de gracia y sólo he visto retazos sueltos al zapear, así que esta decadencia (que conociendo el nivel de la serie tampoco se notará tanto) me trae bastante sin cuidado.
seberg
Pereza es lo que me da. Hace muchísimo tiempo que empezó a cansar.
velmanui
Frescura, frescura...ni que fuese una lechuga! :P
Miquel Alfonso
Hacia años que no veía la serie. LA vi cuando estrenaron la nueva temporada, hay un personaje que se ve obviamente que es un tipo vestido con una mala peluca que hace de madre del barajas que mas daría para un mal sketch de Jose Mota que para esta serie
En mi opinión la serie deve morir esta temporada, el retorno de Carmen Machi, de Ana Maria Polvorosa y darle un cierre digno a la serie.
ifonly
Yo hace unos años que dejé de ver la serie. Me dí cuenta que la veía algún que otro domingo y que no me reía ni nada. Es casi como el Cuéntame de la TVE en Telecinco, ya que si empezamos a contar los años que esta serie está en antena más los de su predecesora, a lo tonto Telecinco ha tenido una gallina de huevos de oro durante 15 años. Es hora de descansar e innovar.