Hace unos años el canal NBC reinaba con sus comedias y su bloque de sitcoms de los jueves se llamaba ‘Must See TV’. Pero pasó de las comedias con público en directo (‘Seinfeld’, ‘Friends’) a otras más sofisticadas como ‘The Office’ y ’30 Rock’. Puede que estas no tuvieran muchísimo público pero sí reunían frente los televisores a los espectadores anhelados por los anunciantes. Pero la oficina de Jim y Pam también se despidió y ahora la oferta cómica del canal es un horror. Hagan lo que hagan, no consiguen un éxito moderado por casualidad. ¿O deberíamos hablar con forma pretérita? Porque, de momento, ‘About a Boy’ no les está funcionando mal.
Esta victoria hay que cogerla con pinzas. Esta serie de veinte minutos se emite los miércoles detrás de la gala de resultados de ‘The Voice’, lo que significa que tiene un sustancial cojín de audiencia que le permite brillar un poquito, sobre todo en comparación con las paupérrimas cifras que marcan ‘Community’ y ‘Parks and Recreation’ el día siguiente. Más de ocho millones, más de dos puntos en los demográficos. Otra cosa es qué ocurrirá el día que pierdan el paraguas de Adam Levine y los demás jueces musicales. ‘Go On’ también pareció un éxito el año pasado y Matthew Perry acabó en la calle (otra vez).
‘About a Boy’, además, no es materia de éxito, no transmite estas vibraciones. Es la adaptación para televisión de una novela de Nick Hornby que ya fue llevada al cine con Hugh Grant de protagonista, sobre un soltero empedernido que se hace amigo del hijo de la vecina, un niño con problemas de adaptación. Un concepto que presentan muy bien en el piloto (de hecho, reduce la hora y media de película en veinte minutos prácticamente) pero que hay que ver cómo se traduce a largo plazo.
Katims, el rey de las emociones
Su responsable es Jason Katims, al que conocemos por su trabajo en ‘Friday Night Lights’ y ‘Parenthood’. De sus ficciones anteriores, por lo tanto, podemos extraer que le dará especial importancia a las emociones de los protagonistas. En este caso, se trata de Will Freeman y de sus vecinos, ese niño rarito llamado Marcus y su inestable y alternativa madre Fiona. Peter Pan enfrentado a un niño de verdad y de forma indirecta a las obligaciones que supone hacerse mayor.
Pero la propuesta resulta hasta cierto punto confusa. Los personajes están bien definidos y David Walton nació para este tipo de papeles, pero ‘About a Boy’ no resulta una comedia especialmente divertida. Ni tan siquiera tiene una filosofía cómica muy explícita y las escenas que deberían buscar la risa en el espectador se quedan a medias. Parece que hasta a propósito. ¿Pero esta es la fórmula para encontrar el público perdido? No lo creo.
Series como ‘The Office’, ‘Parks’ y ‘Modern Family’ demuestran que no hacen falta carcajadas del público para ser gracioso. Pero ‘About a Boy’ parece compartir más en común con la comedia cinematográfica o incluso las comedias de una hora que las sitcoms, y no creo que este formato sea especialmente pródigo. En ningún momento ofrece instantáneas suficientemente memorables, lo cual es indispensable en el formato, y surge la pregunta de si debería durar más y enmarcarse en el mismo género que ‘Las chicas Gilmore’, más que nada para poder profundizar en los personajes como a Katims le gusta.
Entre esto y la fina línea que separa al niño protagonista de lo francamente irritante (y eso que Benjamin Stockham está bien), ‘About a Boy’ tiene unos cuantos obstáculos que sobrevivir. Sobre todo tiene que demostrar que no se queda corta en ninguno de sus ámbitos, lo cual me cuesta creer. Pero la actriz Minnie Driver estaba bastante perdida en el piloto con tanto histrionismo y rectificó de cara al segundo episodio, así que quizá no todo está perdido.
En ¡Vaya Tele! | Nueve razones en formato GIF para apuntarse a la vuelta de 'Community'
Ver todos los comentarios en https://www.espinof.com
VER 1 Comentario