Buenas tardes, mis queridos lectores. Cine y libros. Libros y cine. A veces literatura (de primer nivel), otras entretenimientos industriales con contratos ya firmados para las adaptaciones y suculentos movimientos para historias que llenen nuestro tiempo de descanso. Porque, admitamos una cosa, y que sea deprisa: no leemos del mismo modo siempre y eso es una cosa saludable.
Están los poemas, los libros que nos proporcionan una idea más elevada y más justa del entretenimiento y hay otros que leemos por descansar, divertirnos, sin demasiado que encontrar. Como hay distintas lecturas, hay también distintas escrituras y para ello voy a ir elaborando, por petición popular, una serie de posts en las que trataré de dejar la cuestión abordada. De momento, aquí van mis cinco adaptaciones literarias que-me-muero-por-ver, incluso las razones.
1) Las aventuras de Kavalier y Clay, de Michael Chabon
El libro: Novela imaginativa, en su sentido más amplio, y uno de mis libros favoritos, propone a dos ficticios personajes, Joe Kavalier y su primo Sammy Clay, con los que se recorre un mundo (el de los cómics de superhéroes en su génesis tremendo) que da paso a varios más (la segunda guerra mundial y el previo nazismo que generó tanta inmigración, la caza de Brujas de McCarthy) en una historia escrita de un modo delicado y hermoso.
Como adaptarlo: Considero muy equivocado el formato escogido inicialmente por el productor Scott Rudin, actual poseedor de los derechos del libro y un tremendo error escoger a un cineasta tan impersonal como Stephen Daldry (especialista en adaptaciones de escaso interés) para el trabajo. La película merece ser un ejercicio de estilo de primer nivel. Y si Chabon firma el libreto, mejor que mejor. Tal vez sea el proyecto ideal para los hermanos Coen (ahora ocupados en adaptar otra novela de Chabon) o incluso Wes Anderson. ¿Qué me decís?
2) Tishomingo Blues (El Blues del Misisipi) de Elmore Leonard
El libro.: Puro Leonard en su mejor momento. Una historia de venganza racial, del poder (evocador, diabólico) del blues con un golpe perfecto en el que se mezclan el Klu Klux Klan, la guerra civil americana y una bizarra representación que se hace cada año y un saltador-espectáculo que se verá implicado en todo ello. ¿Tiene alguien mejor estilo para el diálogo? Leed esta maravilla en inglés, si podéis.
Como adaptarlo: La sombra de Leonard es muy evidente, baste con ver toda la filmografía de Quentin Tarantino tras leer algunos de sus mejores libros, pero eso no quita que muchas de sus grandes novelas permanezcan sin adaptar. Con talentos tremendos como los de Vince Gilligan (de Breaking Bad), los ya mentados hermanos Coen (muy sabios cuando se trata de usar el sur) o incluso dar a Craig Brewer un proyecto verdaderamente estimulante (y menos encargos).
3) A este lado del paraíso (This Side of Paradise) de Francis Scott Fitzgerald
El libro: La primera novela de Fitzgerald tiene todos los errores de un principiante, pero muchas de las virtudes que atribuimos a un maestro. Una irónica historia de amor de jóvenes que quieren ser literatos y terminan siéndolo, pero marcados por el ego y la ambición en plena era del jazz. Con un estilo admirable, parece que no hay mejor metáfora de los tiempos actuales.
Cómo adaptarlo: El autor ahora goza de dos adaptaciones recientes (una por David Fincher y la venidera por Bazz Luhrmann) que le acreditan, ciertamente, como atractivo de grandes estudios y además Woody Allen le puso como personaje de su fauna parisian. Este es material natural para el olvidado (y genial) Whit Stillman, pero en caso de que se quiere una apuesta segura, que alguien deje a Martin Scorsese y a un grupo de excelentes guionistas (hay demasiados en televisión, pero Matthew Weiner o Terrence Winter serían perfectos) adaptar esta maravilla.
4) El hombre sin rostro, de Masha Gessen
El Libro.: Este es un libro excelente, periodístico, que relata el ascenso de Vladimir Putin a Rusia. ¿Quien necesita una novelería cuando tiene en la realidad a personajes tan sugerentes como el actual presidente de Rusia? Gessen propone un recorrido que va desde lo perturbador (un mediocre y nada brillante agente del KGB) hasta lo megalomaníaco (una red bien establecida de poder de la que puede que sea imposible sacar una democracia rejuvenecida).
La adaptación.: Estamos ante un proyecto ideal para David Fincher o para cineastas aventurados y de estilo sombrío, documental (¿se atrevería Paul Greengrass?) y que francamente tiene demasiada polémica como para ser rodada. ¿Tal vez con el apoyo valiente de la HBO? El libro es material para una gran película. Y una, glups, notable crisis diplomática.
5) Conexión Madrid, de Justin Webster e Ignacio Orovio Monreal
El libro: Otro excelente libro de noficción, en este caso detallando la historia de los hombres que perpetraron el infame atentado de Marzo de 2004 y narrando, de manera minuciosa, la conversión de dos tipos al terrorismo islámico y la entrada a unas redes que poco han sido representadas.
La adaptación: Viendo su última película, parece claro que Enrique Urbizu es el hombre, aunque no esté demasiado interesado en trabajar a partir de materiales ajenos, este sería un gran proyecto. Pero cineastas como el subestimado Alberto Rodríguez serían también formidables elecciones para este material sobre una de las heridas (abiertas) de la reciente historia española con el suficiente rigor y distancia como para no caer en caricatura o simplificación.
¿Qué sugerencias tenéis? ¿Qué libros soñáis con ver adaptados al cine? Este post debe mucho a otros lectores, así que no hay que olvidar que leer es compartir. Vosotros diréis.
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