Pocos momentos definen tan bien el daño que puede hacer la exposición pública como el de Ginés, un antiguo tiktoker que ponía los bocadillos con mucho aceite para que empapen, mostrando los whatsapps que le ha enviado su hija en donde le dice "Demasiado mal lo he pasado ya, haz tu vida que yo haré la mía". Vender hasta los calzoncillos por cinco minutos de casito televisivo. Mientras siga funcionando en audiencia (un 15,8% y 1.494.000 espectadores), nadie le va a decir que pare. Por suerte, este domingo pasaron más cosas en 'Supervivientes' que esta trama ya casi dolorosa de ver.
Dolor y broncas
Manuel Cortés, uno de los ocho concursantes que quedan, ha sido evacuado de la isla por un dolor intestinal. Eso no significa que le hayan echado del juego, porque, al menos a priori, ha mejorado y solo estará dos días apartado de la isla. Por lo visto, el daño era tan grande que prácticamente le hacía doblarse, pero ni tiene que ver con su antigua peritonitis ni significa un adiós. Vamos, que en nada vuelve al turrón y a las nominaciones.
No se ha perdido tanto: por un lado, la visita semanal, que ha sido de la madre de Adara, Elena. Primero, 'Supervivientes' quiso engañar a la concursante haciéndole creer que su madre no había venido para después darle la sorpresa y alargar un ratito más de programa. Tras una pequeña prueba, pudieron estar 22 minutos juntas donde se dijeron todas las cosas más típicas que os podáis imaginar: eres una valiente, estoy muy orgullosa, eres un ejemplo como madre... La verdad, en un entorno tan tóxico como el de Telecinco incluso se agradecen estos momentos de amor. No son muchos.
Y para prueba, el encontronazo entre Adara y Asraf, que, después de todo un concurso unidos, pueden separarse a las puertas de la final. Ella le echaba en cara que sentía la puñalada que le estaba pegando y que llevaba muchos días diciéndole "cositas", algo a lo que él contestaba diciendo un somero "¿Estás diciendo que yo estoy haciendo esto por el concurso?". Mañana veremos más de la bronca en cuestión.
Ah, sí: Artúr y Adara tuvieron una suerte de "primera cita" para quien compre una carpeta a estas alturas. El concursante dice que ella no le gusta para nada pero la verdad es que acabaron comiendo cangrejos como si le gustara. Oh, l'amour en le Telecinque.
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