Hasta ahora, todas las parejas han montado la de dios en los reencuentros de La isla de las tentaciones (menos Laura y Mario). Luego están Paola y Andreu que, para seguir ignorando sus problemas, han decidido irse a vivir juntos.
Di que sí
Durante la hoguera final, esta pareja demostró que sus motivos para separarse no tenían nada que ver con la isla: Paola se pasó todo el reality con sus dramas imaginarios y le echó la bronca (sin dejarle ni un segundo para explicarse) a Andreu por cantarle a otra chica. Él, en vez de salir por patas de ese delirio paranoide, agachó la cabeza, dijo sí a todo y se fueron felices de la mano.
En el reencuentro tres meses después de 'La semana de las tentaciones', ambos han hecho gala de seguir enterrando sus problemas de pareja bajo kilos y kilos de azúcar. Ambos recordaron sonrientes "lo duro que fue su paso por la isla", más por lo que se imaginaban que por lo que pasó realmente.
Andreu recordó que Cristina, la tentadora a la que Paola quería arrancar la cabeza, fue un gran apoyo para él. Ambos siguen siendo amigos y ella le mandó un vídeo al programa, invitándole a visitar Granada. Paola volvió a la carga con sus reproches: "Va de buena amiga y luego sigue teniendo esas intenciones. No sé con qué finalidad te sigue hablando".
Ante la hostilidad de su novia, Andreu volvió a jugar la carta de "finjamos que todo va bien" pidiéndole vivir juntos: "¿Quieres empezar una vida conmigo?". Ella casi hace el pino puente de la alegría: "Claro que sí. Yo quería construir una vida con él y que él no diera el paso a mí siempre me ha generado un poco de inseguridad". Y colorín, colorado, este reality se ha acabado.