A principios de año se estrenaba en Holanda el nuevo reality de éxito de John de Mol (‘Gran Hermano’), ‘Utopia’, un experimento social que aislaba a un grupo de personas con la intención de que creasen su propia sociedad, con sus propias reglas y leyes; su utopía. Los impresionantes datos de audiencia hicieron que las televisiones internacionales pusieran el ojo en este ambicioso formato, y FOX adquirió los derechos para hacer su versión estadounidense.
La cadena no reparó en gastos ni ambición: la producción de ‘Utopía’ debía durar un año, incluía emisión continuada las 24 horas del día a través de feeds de streaming (por los que tenían intención de cobrar si se quería ver al completo) e iba a contar con dos huecos de parrilla semanales, uno los martes y otro los domingos. Dos meses después, y tras haberse cargado la emisión de los martes y movido la otra a los viernes, ha sido cancelada.
Una utopía distópica
El primer fallo de FOX al plantearse su versión del formato fue el casting. No he visto el original holandés –por lo que desconozco el perfil de sus participantes-, pero por los integrantes elegidos para construir esta nueva sociedad cualquiera diría que FOX temía que se quedase en algo demasiado descafeinado. El problema es que todos y cada uno de los habitantes de su utopía eran personas de perfiles muy extremos y excéntricos (como eufemismos de muchas otras cosas) y en general resultaban insoportables y antipáticos.
Además, la violencia verbal, los gritos y los malos rollos han sido los protagonistas del reality desde el mismísimo primer episodio, y han generado un clima desagradable que eclipsaba la idea inicial del programa. Puedo entender que FOX buscase a gente que le diese juego, pero la esencia del formato –la creación de una nueva sociedad- debería haber quedado siempre por encima; quiero pensar que había una forma de afrontar el proceso de casting para dar con participantes interesantes y carismáticos que potenciasen la parte social, política o filosófica del programa.
Un formato sin formato
Pero el principal problema de ‘Utopía’ siempre fue la inexistencia de un formato y estructura claros que atrapasen al espectador (al menos en los cuatro episodios que vi antes de decidir que no le daba más cuartelillo). Las mecánicas de juego existen por algo y un reality de esta naturaleza debe controlar el caos lo más posible. La idea de juntar a un grupo de personas que generasen una sociedad desde cero es muy atractiva y muy pertinente para el clima mundial, pero es eso: una idea. Entiendo que crear normas puede contradecir el espíritu del punto de partida, pero la falta de reglas que involucren al espectador en el proceso y la dinámica de juego es fatal (lo ha sido) en un programa de este estilo.
No hablo de sistemas de votaciones del público ni expulsiones semanales; simplemente hacía falta una mínima estructura que forzase a los participantes a entrar al trapo del formato, a verse obligados a considerar los conflictos a un nivel superior más allá de las tontas disputas de compañeros de piso, que es en lo que se ha quedado el programa. La producción tenía el control organizativo y no era tan complicado encontrar una forma de adaptar las reglas a la idea de la utopía. Podrían haber planteado fórums de disputa o alguna clase de reunión en la que se discutiesen los conflictos por la administración de presupuesto, por ejemplo (el hecho de que lo tengan, por cierto, ya tergiversa la idea de partida).
¿Es contradictorio esto con el “desde cero” del concepto? Quizá, pero el surgir natural de una dinámica de grupo que incluyese reflexiones y debates que llevasen a la organización (o a la no organización) del sistema requería demasiado tiempo, sobre todo con esa panda de descerebrados que ya estaban a edredoning limpio tras tres días juntos. Otra solución habría sido rodar el año entero y buscar la narración después –como hacen en ‘Survivor’, por ejemplo-, pero era un riesgo demasiado grande para FOX y eliminaba la posibilidad de sacar tajada con los streamings 24h.
Sé lo que estáis pensando. Todo mi argumento se podría reducir a que pido un guión para un reality y probablemente es cierto. Todo en televisión tiene cierto nivel de ficción, porque la vida es caótica, aburrida y poco elocuente en sí misma; para trascender a la hora de contar historias, sea en los informativos, las series, los realities o los concursos, todo necesita de cierto orden. Al fin y al cabo, por mucha VERDAZ que quieras vender con una idea como ‘Utopía’, ya la estás encorsetando en una parrilla de emisión.
En ¡Vaya Tele! | 'Survivor', oro televisivo en forma de reality
Ver 6 comentarios