'Ocho apellidos vascos' es la película del año en España. Desde que llegó a la cartelera el pasado 14 de marzo no ha dejado de romper récords. Ninguna otra producción nacional en toda la historia ha recaudado tanto en nuestro país --52 millones de euros, ya solo la supera 'Avatar'-- y se acaba de convertir en la película que más tiempo ha liderado la taquilla española de manera consecutiva: 58 días.
Tras 9 semanas, parece que ha llegado el final de su aventura. Ha caído la venta de entradas --se echa la culpa a una copia pirata...--, se proyecta en menos salas, la hemos visto (casi) todos y el viernes se estrena uno de los blockbusters más esperados de 2014: 'Godzilla'. Sería un milagro --otro más-- que 'Ocho apellidos vascos' aguantara en el número 1, no obstante, ya nadie puede quitarle lo bailao. Antes de que ceda el trono, vamos a repasar las claves de un fenónemo que ha revolucionado los cines españoles.
Da lo que promete
Arriba tenéis el tráiler, no engaña a nadie. ¿Quieres reírte? Ve a verla. ¿Buscas un complejo drama de exquisita puesta en escena? No vayas. Siempre me ha parecido una bobada ese comentario tan habitual después de haber visto una comedia que es más o menos así: "la peli es una mierda pero te partes de risa". A ver, criatura, ¿no has pagado para que te hagan reír? ¡Objetivo cumplido! Se trata de pasar un buen rato y dejarse llevar por el humor de las situaciones y los personajes. Sin duda, la comedia es el género más infravalorado que existe...
Un plato para todos los públicos
No es fundamental pero ayuda a triunfar en taquilla que una película sea apta y disfrutable para el mayor número posible de espectadores. Para toda la familia, desde los jubilados que alzan con orgullo sus descuentos hasta los chavales de instituto que necesitan marcha. Facilita el boca a boca. Los padres puedan llevar a sus críos sin aburrirse o sentir que el contenido es inapropiado. Hay algunas bromas e imágenes subiditas de tono pero solo si se la compara con los clásicos de Disney. En televisión hay más sexo y violencia a cualquier hora.
La química del reparto
Dice Richard Curtis, que sabe "un poco" de comedias románticas, que la tarea más importante del director es acertar con el casting. Si el reparto funciona, la película funciona. Y puede que no sean los intérpretes más talentosos pero el grupo formado por Dani Rovira, Clara Lago, Carmen Machi, Karra Elejalde, Alfonso Sánchez y Alberto López funciona de maravilla. Es asimismo clave para una historia de enredos y amoríos improbables que entre los actores haya química, que resulte creíble la atracción; tanto la pareja joven como la veterana cumplen con el requisito.
Norte y sur
Una de las claves del film de Emilio Martínez Lázaro, escrito por Borja Cobeaga y Diego San José, es el choque cultural entre el norte y el sur, una fórmula que ha funcionado en otros países. Estamos hartos de muchas cosas en este país y una de ellas es el constante enfrentamiento entre políticos que recurren al nacionalismo para conseguir votos y escaños de la manera más burda. La película opta por una batería de tópicos sobre vascos y andaluces para dejar en evidencia la absurda rivalidad que intentan crear, y sobre todo, invita a pasarlo bien juntos, celebrando nuestras diferencias.
La mejor receta contra la crisis
La suerte siempre cuenta. Y la oportunidad. Puedes tener la mejor película pero una mala fecha o una promoción torpe pueden arruinar sus posibilidades comerciales. '8 apellidos vascos' llegó en el mejor momento. Con el país entristecido, enfadado, desesperado por echarse unas risas y evadirse de todo durante 90 minutos. Sacó partido a la Fiesta del Cine y aumentó la curiosidad de quienes todavía se resistían a descubrir el último hit del cine español. Cumplió las expectativas. Se corrió la voz. Y aún sigue en lo más alto de la taquilla.
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