Son muchas las quejas que ha habido alrededor del sistema de subvenciones al cine español, desde los que consideran que todas las películas son lamentables y que no deberían recibir ni un céntimo hasta otras mucho más concretas como las graves sospechas de amaños por parte de los productores para recibir el mayor dinero público posible.
Estamos ante una práctica lamentable, pero está muy extendida la idea de que varias empresas se aprovechan descaradamente de esta posibilidad para conseguir que sus producciones acaben resultando beneficiosas pese al escaso interés que el público pueda tener en ellas.
Hace algo más de un año se hicieron públicas unas escandalosas acusaciones contra Salomón Shang, artista polifacético que ejercía tanto como director, actor, guionista, productor, exhibidor y distribuidor. La realidad era que Shang había conseguido ingresar más dinero a través de las subvenciones que por su exhibición en salas, habiendo casos tan sangrantes como el de ‘La Llegenda del L’innombrable‘ (2010), en la que el dinero público recibido cuadruplicaba sus ingresos en salas. Sus chanchullos no acabaron ahí, ya que llegó a recibir una subvención de casi 350.000 euros por su documental ‘Carl Gustav Jung‘ (2007), una obra que decía partir de una grabación inédita encontrada y restaurada por el propio Shang, pero que a la hora de la verdad era un simple plagio de ‘Jung on Film‘ (Stephen Segaller, 1957).
Sin embargo, atropellos como ése se solapaban con algo más grave: La falsificación de datos en lo referente a la exhibición, es decir, declaraba que sus obras recaudaban mucho más de lo que realmente ingresaban para así poder recibir más dinero público. La cuestión es que existe una ayuda a la amortización por la que las cintas españoles reciben un 15% de la recaudación bruta de las películas con un tope de 400.000 euros, cifra a la que hay que una ayuda suplementaria del ICAA si consiguen superarse las 35.000 entradas vendidas. Todo demasiado jugoso como para que nadie intente aprovecharse de ello, en especial si eres también el dueño de varios cines donde puedes estrenar tu película y luego declarar los datos que más te convengan.
El problema es que lo pillaron y las sanciones por parte de la Generalitat catalana empezaron a acumularse, por lo que, de buenas a primeras, desapareció tras haberse llevado varios millones de euros en ayudas públicas. Sin embargo, lo que ahora nos interesa no es Shang, ya que están surgiendo acusaciones de ese tipo contra José Luis Garci y la olvidable ‘Holmes & Watson: Madrid Days‘ (2012).
El caso de ‘Holmes & Watson: Madrid Days’
Hace unas semanas se estrenó ‘Holmes & Watson: Madrid Days’ con más pena que gloria. Apenas se exhibió en 51 salas y la recaudación de su primer fin de semana apenas ascendió a unos 60.000 euros con poco más de 7.500 espectadores. Esas cifras fueron descendiendo hasta quedarse por debajo de los 700 euros de recaudación en el fin de semana del 12 al 14 de octubre. La película parecía condenada a una pronta desaparición de la cartelera, quedándose bastante lejos de las 35.000 entradas vendidas a las que aludía con anterioridad.
Sin embargo, Nickel Odeon, la productora de Garci, consiguió romper el acuerdo de distribución que tenía con Alta Films tras ese fin de semana, pasando a ser World Line Cinema la encargada de relanzar la película. Y se ve que lo hicieron bien, porque ‘Holmes & Watson: Madrid Days’ pasó a exhibirse en 17 cines, un claro incremento respecto a los 3 de la semana anterior, pero lo más llamativo es que su recaudación aumentó un 5.302,7%, consiguiendo unas cifras cercanas a los 40.000 euros y una cantidad de entradas vendidas que casi iguala a la de su estreno. Todo esto hace hace que la película prácticamente sume ya un total de 30.000 espectadores, una cifra que se aproxima sospechosamente a las necesarias para recibir dicha ayuda suplementaria.
La trama se complica cuando Retrank, empresa especializada en ofrecer datos de taquilla a lo largo de todo el planeta, dejó fuera de los datos definitivos a la película de José Luis Garci. ¿El motivo? Al no estar ya distribuida por Alta Films no había cifras oficiales, ya que los datos recogidos días antes, cuya validez se refrendó desde Retrank España, provenían de la información que daban las propias salas de cine, siendo las definitivas las que provienen de las distribuidoras. Eso sí, en la imagen superior podéis comprobar la evolución de la carrera comercial de la película según datos suministrados por la web Box Office Mojo.
Investigando al respecto, descubrimos que World Line Cinema apenas había distribuido un par de títulos hasta la fecha, siendo también los encargados de hacernos llegar ‘Vulnerables‘ (Miguel Cruz Carretero, 2012) a partir del próximo miércoles 31 de octubre. Lo curioso es que desde la empresa comentan que ellos no tienen ni la más mínima idea de lo que ha sucedido, aduciendo a la posibilidad de que Nickel Oden haya llevado a cabo alguna promoción especial para llamar la atención del público.
Todo empieza a oler demasiado a chamusquina cuando resulta imposible encontrar información sobre en qué cines se exhibió la película durante esa milagrosa resurrección comercial y por la capacidad que ha demostrado Nickel Odeon para usar el silencio como su única respuesta ante las preguntas incómodas. Recordemos que Garci ya es todo un experto en cuanto a subvenciones se refiere, pues su ‘Sangre de Mayo‘ (2008) estuvo financiada totalmente con dinero público, algo especialmente escandaloso por seguir siendo a día de hoy una de las diez producciones más caras de la historia del cine español: 15 millones de euros costó y ni siquiera uno logró recaudar en los cines españoles.
En condiciones normales, uno daría por sentado que se va a investigar a fondo este caso, pero son tantos los casos en los que ha habido sospechas similares de compras de entradas por parte de los productores de las películas que quedaron en nada que uno pierde la fe en que vaya a esclarecerse el milagro de ‘Holmes & Watson: Madrid Days’. El hecho de que uno de los guionistas de la película sea Eduardo Torres-Dulce, fiscal general del estado, y que Alberto Ruiz Gallardón, ministro de justicia, haga una pequeña aparición como actor tampoco invitan al optimismo. Luego quizá haya una explicación perfectamente normal, pero el silencio de la productora de Garci incita a pensar muy mal sobre lo sucedido ante su evidente falta de transparencia.
Personalmente, me parece que prácticas de este tipo son uno de las principales causas de que el duro recorte que el gobierno del PP hizo de las subvenciones del cine español quizá no sea algo tan negativo, aunque seguramente hubiera sido mejor centrarse en cambiar las evidentes lagunas del sistema (hecha la ley, hecha la trampa) y no tanto en reducir considerablemente la aportación económica del estado. ¿Qué opináis vosotros al respecto?
Imagen de Salomón Shang | Ara
Vía | Box Office Mojo y El Mundo (edición impresa)