A finales del 1999 y principios del 2000 'El proyecto de la bruja de Blair' ('The Blair Witch Project', 1999) era el vórtice fundamental del cambio de tendencia de una década bastante aciaga para el cine de terror. Siendo la película más rentable de toda la historia, se generó gran cantidad de merchandising asociado y se buscaba una secuela a toda costa para poderse estrenar el Halloween del año siguiente.
Pero la presión y el hype de ser la “película más aterradora de la historia” hicieron a sus creadores esperar para lleva a cabo una continuación. Artisan, su distribuidora, quería sacar rédito cuanto antes y decidió seguir adelante sin sus creadores con el resultado de 'El libro de las sombras: Blair Witch 2' ('Book of Shadows: Blair Witch 2', 2000) que resultó tal fracaso que acabó con la feliz idea de la distribuidora de poder exprimir más la gallina de los huevos de oro. La parte que no sabemos es que Haxan, la productora original, tenía sus propias ideas planeadas.
No solo tenían un ‘Proyecto de la bruja de Blair 2’, sino que habían pensado en una franquicia de hasta cinco capítulos, entre secuelas, precuelas y spin offs explorando la mitología completa de la bruja y su leyenda. Es interesante puesto que muchas ideas todavía tienen perfecta validez para convertirse en capítulos de la saga. Repasemos una por una.
La historia de Elly Kedward
Eduardo Sanchez y Dan Myrick, y el resto de equipo de Haxan hicieron una lluvia de ideas para la precuela principal de la saga. Ambientada en 1785, contaría la historia de la inmigrante irlandesa Elly Kedward y cómo fue expulsada de la colonia del pueblo de Blair por ser una bruja, tratando de crear un pieza de época pura, rodada con luz natural como Kubrik su 'Barry Lyndon' (1975), historia que recuerda muchísimo a lo que realmente hizo Robert Eggers en ‘La Bruja’ (The VVitch,2015).
El objetivo de Myrick era que la historia de Blair no se quedara en limitarse a grabar a unos cuantos muchachos en el bosque (que es exactamente lo que a ocurrido con la nueva). La historia de esta precuela proponía mostrar la muerte de Kedward al principio de la película y descubrir que fue el chivo expiatorio y que su muerte no tiene ningún efecto; la presencia que habita el bosque es una fuerza más antigua.
Un embrujo que estaría en los bosques de Black Hills, al menos, desde que los nativos americanos ya se negaran a acercarse a ellos, con sus propios nombres y reglas para esa entidad sobrenatural. Lo que sugiere Haxan es una entidad casi Lovecraftiana que hubiera habitado la zona antes de la llegada de los humanos. Tampoco querían demostrar que Kedward fuera completamente inocente, dejaban la ambigüedad de si la entidad habría sido invocada por ella o si surgía como castigo a los hombres por maltratarla.
La historia de Rustin Parr
La idea fue rechazada primero por Artisan y después por Lionsgate, que tiraron por la idea del reboot-secuela, y aunque aquella era muy querida por el equipo, tenían más ideas en la manga para presentar alternativas. La segunda sería sobre el asesino en serie Rustin Parr. Otra pieza de época, como si fuese una película de cine negro de los años 40, intentando crear una línea de distintos estilos para cada una de las precuelas y podría tener como base alguna de las historias de los mockumentaries hermanos a las películas.
Otras precuelas posibles
Las grandes esperanzas de los directores eran las dos anteriores, pero su estrategia era esperar y probar como se desarrollaba todo dejando como posibilidades alternativas un par de ideas surgidas a lo largo de la elaboración de la compleja mitología de la primera película. Una de ellas era la historia de Eileen Treacle, una niña que desapareció en el río raptada por una mano fantasmal. La otra historia era ‘Coffin Rock’, sobre el incidente de una brigada de rescate que murió en un asesinato ritual.
La continuación que se preparaba en 1999
El plan de los directores era haber hecho una o varias precuelas de la película y cuando hubieran agotado bien la mitología, plantear una secuela a la original. No hay muchos datos de lo que en realidad querían hacer en ella, ya que consideraban que pasarían muchos años en hacer al menos tres precuelas antes. La idea principal, en aquel momento era plantear una especie de similitud entre ‘Alien’(1979) y ‘Aliens’(1986), pero aplicado a la escala de su primera película.
Mientras esta era un ejercicio de claustrofobia, la segunda aumentaría el número de personajes y planteaba a un grupo de hombres armados que quieren saber que es lo que pasa en el lugar. Como la película de James Cameron lo es a su antecesora: más violenta y con tendencia hacia el cine de acción. Aunque a Dan Myrick tenía su propia idea para una secuela en la que Michael DeCoto, el profesor de Heather en la primera película, unía piezas tras la desaparición de los estudiantes.
Otra secuela frustrada en 2009
Cuando Lionsgate compró los derechos de la franquicia en 2003, no tenía muy claro que hacer para resucitar a la bruja y decidieron que quizá lo mejor sería que Eduardo Sanchez y Dan Myrick, junto al productor Gregg Hale, escribieran la tercera película con la condición de que fuera una secuela, contemporánea y rodada en 3D (eran los tiempos post-Avatar). Así que escribieron lo que querían, prestando menos atención a lo que les pasó a los estudiantes y centrándose en la entidad del bosque.
A grandes rasgos, contaría la historia de una madre y su hijo, que se mudan a una zona muy cerca del bosque de la primera y quedan absorbidos por toda la leyenda de la bruja y lo que pasó allí. Estaría rodada con narrativa tradicional peor asumiendo que la desaparición de los estudiantes fue un hecho, pero no se centraba demasiado en ellos, sino que sería otro nuevo evento en la historia de sucesos relacionados con la bruja en el timeline de la historia.
El futuro de la Bruja de Blair
Los directores aún esperan que Lionsgate se pueda interesar por alguno de los proyectos que han llegado a proponer, que como hemos visto, no son pocos. En sus propias palabras, tienen líneas argumentales y historias abiertas que solo necesitan ajustes para cerrarse si se les da la oportunidad. Aunque los muy discretos resultados de taquilla pueden ser la prueba de que interés del público por el fenómeno está acabado. O quizá es porque la nueva 'Blair Witch', es un fracaso a varios niveles artísticos que ha cerrado las puertas a nuevas opciones.
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