Qué fue de Inma del Moral, de reportera de 'El informal' y novia de Pedro Ruiz a trabajar en una farmacia

Qué fue de Inma del Moral, de reportera de 'El informal' y novia de Pedro Ruiz a trabajar en una farmacia

Empezó de modelo, pero acabó surfeando la fama como mejor pudo

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Inma

Fue un 13 de julio de 1998 cuando 'El informal' abrió sus puertas en una Telecinco que aún no se había dejado consumir por la telebasura. Eran tiempos raros, en los que nadie tenía miedo a innovar, donde la televisión lineal seguía siendo el centro de toda la casa a falta de Internet, móviles o Netflix. Y ese día también entró en las casas de toda España una reportera rubia y carismática que seguía la estela canalla de 'Caiga quien caiga': Inma del Moral. Sin embargo, han pasado 25 años y parece haberse volatilizado de la televisión. ¿Por qué? ¿Qué fue de Inma del Moral?

Inma del Molar

Inmaculada del Moral nació el 3 de abril de 1974 (o sea, que ahora tiene 50 años recién cumplidos) en Madrid, y años después, en una entrevista con El Mundo, calificaría a su infancia de "Muy bonita, muy adentro, amplia, en una casa con gente bonita en la que no me ha pasado nada malo". Ella soñaba con ser modelo en una época donde te daba un estatus social inigualable, y, de hecho, lo consiguió muy pronto: a los 17 años viajó a Milán tres días para unos desfiles y acabó quedándose a vivir durante años.

No paraba de salirle trabajo de lo suyo, y lo exprimió todo lo que pudo hasta que en 1998, aún viviendo en Italia, recibió la llamada de Telecinco, para participar en unos castings internos de la cadena. Gustó tanto que inmediatamente la pusieron junto a Jordi Estadella en un programa llamado 'Perdonen nuestros pecados', un meta-programa televisivo de "humor inteligente" ("donde no tiene lugar la zafiedad", decía su director) que incitaba al público a mandar sus "gazapos televisivos" para ganar dinero y que duró... un solo episodio.

No importaba, porque estaban decididos a convertirla en una estrella. Poco después decidieron que junto a Javier Capitán y Florentino Fernández iba a ser la cara visible de 'El informal', un programa de actualidad y humor que llegaba dispuesto a romper con todo. Se convirtió en un exitazo inmediato e Inma, interpretando a la reportera que siempre se quería ligar Flo (sin mucho éxito), se catapultó a la fama con la frase "lo que diga la rubia" y con una mezcla de desparpajo propio y guion escrito por el equipo del programa. Y entonces, mientras surfeaba la ola, decidió bajarse de la tabla. Ahí empezó su caída.

Qué moral, Inma

La presentadora empezó una relación sentimental con el presentador e intelectual Pedro Ruiz, que la llevaba 27 años, y dicen las malas lenguas que dejó 'El informal' por amor. Otros dicen que al aparecer en las revistas del corazón rompió el código deontológico del programa, y también quien cree que fue porque quiso explorar nuevas andanzas profesionales. Dividieron, pues, sus caminos: el programa siguió el suyo (convirtiendo en estrella a una entonces desconocida Patricia Conde) y ella otro muy distinto.

Inma

Por aquel entonces empezó a probar suerte en el cine, con pequeños papeles en 'La mujer más fea del mundo' y 'La familia... 30 años después' mientras en televisión presentó 'Vértigo' junto a Antonio Resines, que trataba de promocionar el cine español para promover la -ya entonces se decía- "raquítica asistencia a las salas". Fue solo un momento, igual que su aparición en la serie 'Un chupete para ella', porque enseguida empezó el siguiente proyecto que podía cambiar su vida: 'El rayo'.

'El rayo' empezó en el 2000 y era un late night de Antena 3 basado en las entrevistas y reportajes (donde debutó Juanra Bonet, por cierto) presentado por ella y un sorprendente Jordi Cruz, que supuso una de las más grandes apuestas de la temporada, pero que en 2001 se canceló por baja audiencia. Poco después continuó su camino en el cine, con papeles en 'Marujas asesinas', 'La marcha verde' (donde ganó el premio a peor actriz en los premios Godoy... y no sería el último) y 'Tánger'. El futuro no pintaba de color de rosa.


¿Qué pasa después de ser famosa?

Inma del Moral se casó en 2003 con un cámara argentino al que conoció durante 'El rayo' con quien aún sigue y, sobre todo tras el nacimiento de su hijo tres años después, fue espaciando aún más sus apariciones: tuvo una sección sexual (como "sexorcista") en el programa radiofónico 'Anda ya', probó como presentadora en 'La guerra de los mandos' (de La 1) y tan solo salió de su semi-retiro para hacer, de 2013 a 2016, de Wanda en la serie 'Cuéntame cómo pasó'.

Pero entonces, ¿qué ha pasado con ella? ¿Se ha volatilizado? En su Instagram sube fotos de todo tipo, pero rara vez laborales, y en 'Pasapalabra' dio con el motivo: había dejado apartada su faceta artística para meterse de lleno en... la farmacéutica. No sabemos si algún día entraremos a pedir un Gelocatil y nos la encontraremos de frente, pero siempre está bien saber qué pasa cuando los teléfonos dejan de sonar: simplemente, te mueves en otra dirección. Pivotas.

De vez en cuando la podemos ver en campañas publicitarias además de concursos y programas como 'Hipnotízame', '25 palabras' o 'Dani y Flo' ayudando a los concursantes o siendo entrevistada, pero... ¿Qué espera al futuro de Inma del Moral? Quién sabe. Nunca es tarde para un retorno, pero solo si ella decide que la vida le lleva hasta ahí. Que es lo que necesita para ser feliz.

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