En el día de ayer, Boris Izaguirre anunció en una feria literaria que se retiraba de la televisión para así poder hacer lo que más le gusta, escribir. Yo, desde aquí, le quiero desear mucha suerte en su carrera literaria y de paso, darle las gracias por dejar el mundo de la televisión.
Yo soy una de esas personas que disfrutaba, unas veces más o tras menos, con Crónicas Marcianas y con las actuaciones de Boris de vez en cuando pero, después de ver lo que ocurría desde la distancia, creo que el escritor (habrá que llamarlo ahora así) ha tomado la mejor decisión de su vida, porque él para la televisión no vale. Sólo había que verlo en Channel Nº4 o analizar sus actuaciones en la desaparecida Crónicas, se dedicaba únicamente a soltar frases sin sentido e intentar llamar la atención de la cámara de cualquier manera. Muy al contrario de lo que hacía en radio o en el papel, ya que Boris se transforma completamente cuando no hay una cámara delante y se vuelve un buen comunicador, aportando razonamientos e ideas interesantes y contando historias muy buenas (en el caso de los libros).
Ya que le he dado las gracias, desde aquí también quiero animaros a que leáis su último libro, ya que es una lectura bastante interesante, y no lo digo únicamente yo, sino los del Premio Planeta que lo han puesto de finalista.
Vía | 20minutos