El equipo de Xataka ha realizado el muy ilustrativo vídeo que tenéis a la cabecera de este post. En él se narra, de forma muy amena, los principales avances tecnológicos de los últimos 30 años con respecto a las formas de comunicarnos o consumir música y cine. Aun recuerdo el exitoso walkman, que fue toda una revelación, y cómo no, el en aquel entonces el maravilloso VHS —a pesar de su inferioridad ante el sistema Beta—. Maravilloso porque te permitía conservar la película y verla cuantas veces quisieras, a pesar del ruidito del stop o el reinicio. La calidad era más que aceptable, aunque en aquellos años muchos pensábamos que era inigualable. Y eso que la mayoría de las veces, las películas no eran editadas en su formato original, algo que también sucedía en sus emisiones televisivas con bastante frecuencia.
Treinta años después aquello suena a prehistórico, o tal vez lo era. No hay más que comparar la calidad de un VHS con la de un Blu-ray y comprobar con qué poco nos conformábamos entonces. La posibilidad de tenerlo todo almacenado en un disco que te permite disfrutar las películas en versión original con subtítulos, teniendo además una cantidad de extras de apoyo al visionado del film, es algo que no hubiéramos imaginado ni en nuestros mejores sueños. Y ya no hablemos de Internet, el futuro, perdón, el presente. Efectivamente, los tiempos han cambiado. Puede que artísticamente las nuevas tecnologías hayan influenciado negativamente en este nuestro arte preferido, pero no hay duda que desde la perspectiva del disfrute doméstico las posibilidades se han multiplicado considerablemente.
Y tal y como reza el final del vídeo, ¿qué nos depararán los próximos treinta años?
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