Siempre supone un mal trago escribir este tipo de textos y decir adiós a todos esos grandes creadores del medio cinematográfico que hacen más llevadero el día a día con su obra; pero casos como el del compositor Jóhann Jóhannson, que acaba de dejarnos a la temprana edad de 48 años, se reciben como un especial jarro de agua fría por lo inesperado de la noticia.
En este momento aún no han trascendido las causas de la muerte del brillante músico islandés nominado al Oscar en dos ocasiones por su trabajo en 'Sicario' y 'La teoría del todo' —ganando el Globo de Oro por esta última—, siendo la única información disponible que ha fallecido en la ciudad de Berlín tras, supuestamente, haber estado desaparecido durante varios días.
Pese a no haber sido demasiado longeva, la trayectoria de Jóhannsson en el campo cinematográfico ha dejado huella gracias a su talento desbordante, siendo uno de sus primeros éxitos su obra para 'Prisioneros', que dio inicio a una fructuosa relación profesional con el realizador franco-canadiense Denis Villeneuve.
Las primeras reacciones a su desaparición no se han hecho esperar, destacando el siguiente comunicado de la agencia Gorfaine/Schwartz, con la que trabajaba el compositor.
"Estamos profundamente entristecidos por la repentina pérdida de nuestro cliente y querido amigo Jóhann Jóhannsson, cuyo gran talento, humildad y bondad enriquecieron inmensurablemente nuestras vidas. Su música ha inspirado a las nuevas generaciones de cineastas y compositores. Será muy echado de menos por su familia de gorfaine/Schwartz y por toda la comunidad del cine y la música"*.
Su rol como consultor musical para Darren Aronofsky en 'Madre!', que ha dado lugar a una B.S.O. —o a la ausencia de ella— única, sugestiva e irrepetible, ha sido uno de los últimos que ha desempeñado un músico al que, seguramente, aún le quedaba muchísimo que ofrecernos.
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