"Intentar seducir a alguien no es un crimen". 100 artistas francesas denuncian una "caza de brujas" contra los hombres

Mientras Hollywood aplaude que los Globos de Oro sirvieran como plataforma contra el machismo y el acoso sexual en la industria, en Francia se ha producido una llamativa rebelión. Cerca de 100 artistas francesas, entre las que se incluyen la actriz Catherine Deneuve o la cineasta Brigitte Sy, han firmado una carta abierta donde denuncian una "caza de brujas" contra los hombres, provocada a raíz de las numerosas denuncias del caso Weinstein.

"Violar es un crimen, pero intentar seducir a alguien, incluso de forma persistente, no lo es; tampoco es un ataque machista que un hombre se comporte de forma caballerosa", afirma este colectivo de mujeres en el manifiesto que se ha publicado en el periódico francés Le Monde. Y ojo, avisan que esta persecución contra los hombres se está transformando en una amenaza contra la libertad sexual (no, no es broma).

"Los hombres han sido castigados sumariamente, forzados a dejar sus trabajos cuando todo lo que hicieron fue tocar la rodilla de alguien o intentar robar un beso", añaden. No recuerdo que nadie haya sido despedido por tocar una rodilla pero creo que si una persona en situación de poder intenta "robar un beso" (vaya manera más bonita de describirlo) debería ser visto como un comportamiento inadecuado. En Hollywod, en Francia y en todas partes.

Pero lo más llamativo son las peligrosas consecuencias que, según las mujeres que han firmado esta carta, están provocando los movimientos anti-acoso como el Time's Up ("Se acabó el tiempo"), el #MeToo (#YoTambién) o el equivalente francés, #BalanceTonPorc (#DenunciaATuCerdo). Según las firmantes de la carta, estas protestas y manifestaciones están desatando una "oleada de purificación" que afecta a la libertad sexual. Así lo explican:

"Lo que comenzó como una liberación de las mujeres para hablar, se ha convertido hoy en todo lo contrario: intimidamos a la gente para que hablen 'correctamente', callamos a aquellos que no pasan por el aro, y aquellas mujeres que rechazan inclinarse [a las nuevas realidades] son consideradas cómplices y traidoras. En lugar de ayudar a las mujeres esta histeria de enviar a esos (hombres machistas) 'cerdos' al matadero en realidad ayuda a los enemigos de la libertad sexual: extremistas religiosos y la peor forma de reaccionarios."

Catherine Deneuve pide disculpas... pero defiende su postura

Variety recoge extractos de un comunicado público realizado por Deneuve, donde explica por qué firmó el manifiesto y cuál es su punto de vista sobre las denuncias y los casos de acoso sexual. Además, pide disculpas a las víctimas que se hayan sentido ofendidas por la carta:

"He sido actriz desde que tenía 17 años. Obviamente puedo decir que a menudo he sido testigo de situaciones que eran más que ofensivas, o algunas que conozco por otras actrices sobre cineastas que abusaron cobardemente de su poder."

"Nada en esa carta pretende decir que el acoso tiene algo bueno, de otro modo no la habría firmado."

"No me gusta este aspecto de nuestros tiempos donde cada uno se siente libre de juzgar, arbitrar, condenar; una sociedad donde simples denuncias en las redes sociales llevan a un castigo, pérdidas de trabajo y a menudo un linchamiento en los medios."

Deneuve cree que parte de la solución reside en la educación de "nuestros chicos y también de nuestras chicas", además de la puesta en marcha de "protocolos de las compañías permitiendo lanzar de forma inmediata persecuciones legales en caso de acoso". "Creo que en la justicia", afirma, y deja claro que no apoya los comentarios de todas las mujeres que firmaron el manifiesto. Concretamente, Deneuve se ha referido a unas polémicas declaraciones de la actriz porno Brigitte Lahaie, que habló de orgasmo y violación durante una entrevista en TV:

"Decir en un canal de televisión que alguien puede tener un orgasmo durante una violación es peor que escupir en la cara de todas esas mujeres que han sido víctimas de este crimen."

"Soy una mujer libre y siempre lo seré. Saludo fraternalmente a todas las víctimas de actos odiosos que se hayan podido sentido ofendidas por esta carta pública aparecida en Le Monde. Es a ellas solamente a quienes presento mis disculpas."

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