Cuando, en nuestra primera parada de este “Especial nuevas formas de ver cine“ hablábamos de iTunes Movie Store, ya resalté que el público potencial de la propuesta de Apple era el aficionado a los estrenos grandes o al cine más comercial y que los aficionados al cine clásico o a propuestas minoritarias e independientes apenas encontrarían allí lo que buscasen.
Por contra, Filmin plantea a ese público un lugar donde reunirse, ya que en poco tiempo se ha convertido en la plataforma de distribución de cine independiente bajo demanda. Gracias a la asociación de Filmin con las más importantes distribuidoras de esos catálogos, hay mucho futuro y muy buen presente en una propuesta tan necesaria como disfrutable.
Filmin: Catálogo
El catálogo de Filmin no esta pensado si tu objetivo es ver el próximo ‘Transformers’, al menos hasta que Michael Bay decida hacerse indie. En el caso improbable de que algo así ocurra, si Bay encuentra sitio en la distribución fuera de Hollywood, estará aquí. Porque, ahora mismo, nombres como Cameo, El deseo, Tornasol Films, Golem, Vértigo, Avalon, Wanda Films, Alta, Vostok o Versus son las que nutren Filmin de cine.
No hace falta aclarar que, con esos nombres, está disponible la mayor parte del cine europeo de renombre de los últimos años; también directores como Lynch, Natali, Gus Van Sant, Cronenberg, Egoyan, Wong Kar Wai… Y que, de lo visto en festivales, Filmin copa bastantes estrenos e incluso ha llegado a plantear que se pudieran ver todas las películas de un festival a la vez que esté tenía lugar.
Ahora mismo, Filmin tiene 1192 películas en una catálogo que crece cada día y que, desde hace nada, ha empezado a incorporar también series: no sólo el ‘The Kingdom’ de Lars Von Trier, sino algunas de las mejores comedias británicas de los 80 están en el catálogo del servicio. Teniendo en cuenta que en junio del año pasado, al poco de nacer, sólo había 200 películas para elegir, queda claro que en este aspecto se están haciendo bien las cosas.
Filmin: Calidad de imagen, formatos y respuesta del servicio
Filmin apuesta, ya desde la entrada en su web, por un diseño muy cuidadoso, que le diferencia de otras propuestas españolas como Filmotech o Cineclick, mucho menos cuidadas en este aspecto. Y, además, ha sabido hacer que su streaming sea casi excelente, así como la calidad de la mayoría de las películas, que suelen ofrecerse en VOS y/o dobladas.
Todas ellas se ofrecen en un buen SD (salvo algunas copias que parecen un ripio mal hecho, especialmente algunas de los 80 que no han sido reeditadas en mejor calidad) y bastantes pelílas están ya también en HD. Según Filmin, si eres suscriptor Premium, podrás tener acceso a todo el catálogo en alta definición, una decisión algo polémica que, sin embargo, tiene sentido si lo que quiere el servicio es un público fiel y que apueste por el pago por suscripción.
Pero, pese a lo que indica la publicidad, no todas las películas están en alta definición, e incluso tampoco todas las recientes. Hace falta que Filmin aclare más este punto y que los suscriptores lo sepan de antemano.
Eso sí, estos días la web ha estado caída por culpa de la tormenta que destrozó el datacenter de Amazon en Irlanda. Son los peligros de apostar por el cine en streaming: como no lo tienes en tu disco duro, dependes de factores externos para poder verlo.
Filmin: Precio y extras
El precio depende de cómo queramos acceder a la oferta de Filmin. Por un lado, podemos elegir entre acceder de manera individual a las películas que queramos y los precios suelen oscilar entre 1,95 y 2,95 euros. Una vez alquilada la película, tenemos 72 horas para verla. Dentro del mercado en streaming de España, es una de las ofertas mejor planteadas.
Pero, además, Filmin introduce algo muy del gusto de los servicios en streaming: la suscripción. Gracias a ella podemos acceder, durante el tiempo que estemos dado de alta como suscriptores, a casi todo su catálogo, para poder disfrutar de las películas cuantas veces queramos. Eso y otros extras más por ser Premium, algo que cuesta 15 euros si es sólo un mes, 30 por un trimestre y 110 euros al año.
Ser suscriptor, como decía, nos permite ver casi todo su catálogo sin restricciones. El “casi” lo marca la sección “Premier”, en la que Filmin incluye pre-estrenos y films exclusivos. Tener el cine en casa a la vez que se estrena en salas (o en festivales): ¿no es ésa una vieja aspiración de muchos? Para esas películas, hay un precio especial o, si eres suscriptor, la posibilidad de ver tres de ellas al mes dentro de la cuota de suscripción.
Soportes
Cuando Filmin llegó, apostó por ser lo más abierto posible, evitando posibles DRM que dificultarán al posible espectador el acceso a sus películas desde cualquier ordenador o dispositivo. Es por ello que Film sea compatible con todas las plataformas y que siga creciendo.
Lo último en llegar ha sido una nueva aplicación nativa para iPad que aún necesita mejoras: es poco estable y se cuelga más de lo debido, por lo que en ocasiones resulta frustrante querer ver la película desde el tablet de Apple (por no hablar de algo tan simple e ilógico como tener que estar metiendo tu usuario y contraseña cada ves que accedes).
Además, Filmin debería luchar por incorporar acceso a las películas en modo offline, por ejemplo para los suscriptores. Teniendo en cuenta que éste y otros dispositivos móviles están pensados para trabajar en movilidad y que no en todos los viajes te aseguras una conexión a internet decente (y barata) sería la mejor manera de fomentar el uso de Filmin en cualquier lugar.
En todo caso, lo que sí asegura Filmin es la posibilidad de ver las películas desde cualquier Media Center que tengáis junto a la televisión o desde consolas como la PS3, que pueden actuar como tal. Y se anuncian aplicaciones nativas para Android para un futuro próximo.
Valoración general de Filmin
Filmin es la apuesta más clara por crear en España nuestro propio Netflix (servicio del que os hablaré en unos días y que aún no está disponible por aquí). Pero ha ido más lejos: es un Netflix diferenciado por catálogo, que busca al cinéfilo al que le encanta ver el cine de festivales y acceder a las propuestas minoritarias que muchas veces tienen cerrado el acceso a las salas de los grandes multicines.
Es una apuesta clara por buscar mercado a muchas películas que no lo tienen fácil para acceder a la primera ventana, las del espectador de salas. Y en servicio y precios está a la vanguardia, por lo que no se puede hacer sino aplaudir a una propuesta arriesgada pero que llega en el momento justo para situarse como referencia.