China quiere convertirse en el nuevo Hollywood y este es su plan para lograrlo en el año 2035

La importancia de China para el séptimo arte no deja de crecer. Hasta ahora muchos se habían centrado en pensar que dicho país iba a ser la salvación para el ralentizamiento de la taquilla mundial, pero las autoridades chinas tienen otros planes. Su objetivo es convertirse en el nuevo Hollywood y se han puesto de plazo hasta 2035 para conseguirlo.

El hombre detrás de ese ambicioso plan es Wang Xiaohui, viceministro ejecutivo del Departamento de Publicidad del Comité Central del Partico Comunista chino y director del departamento cinematográfico nacional. Durante el primer simposio cinematográfico nacional celebrado en Pekín ha destacado que China ya es una "gran fuerza cinematográfica", pero que todavía le falta camino por recorrer para estar al nivel de Estados Unidos, añadiendo lo siguiente:

Los problemas del cine chino

China ya ha ocupado su lugar en el centro del panorama mundial y las películas chinas deben tener su lugar adecuado en el mundo, pero el nivel actual de desarrollo de nuestra industria cinematográfica no es proporcional al status de Chino. El nivel de desarrollo cinematográfico de un país debe reflejar toda la fuerza nacional.

Además, Xiaohui ha señalado que "en líneas generales, nuestra habilidad para contar historias está por detrás de Hollywood y Bollywood". A priori, esa afirmación puede chocar con el hecho de que el cine chino ha conseguido la mejor cuota de pantalla nacional de su historia con un 62% de los ingresos, pero luego uno mira los datos concretos y descubre que apenas un 2% de los largometrajes realizados se lleva más del 53% de lo recaudado por los productos locales.

De hecho, 300 de las 400 películas que llegaron a los cines recaudaron menos de 150.000 dólares y hay cientos de ellas que nunca llegaron a estrenarse. El plan consiste en apostar por realizar 100 películas al año que consigan recaudar cada una de ellas al menos 15 millones de dólares en la taquilla china.

La solución que plantea Xiaohui

Para ello se ha de apostar por el cine patriótico, aunque Xiaohui ha expuesto dos puntos que pueden chocar entre sí. Por un lado, esas cintas deben mostrar "el sueño chino de rejuvenecer nuestra nación", pero también que "los cineastas deben tener una línea ideológica clara y no pueden retar al sistema político". Suena a querer parecer modernos pero sin serlo, quizá por eso tengan el problema de la falta de talentos que reconoce Xiaohui.

Todo esto coincide con el recordatorio de que la censura china sigue más viva que nunca, ya que pronto se estrenará 'Bohemian Rhapsody', pero lo hará de forma limitada y con al menos un minuto de metraje recortado para ajustarlo a la ideología del país. Por ello, los momentos en los que se consume droga o con besos masculinos quedarán fuera del montaje que puedan ver los espectadores de ese país.

Lo que tampoco ha aclarado Xiaohui es cómo piensa conseguir que esas películas también funcionen más allá de las fronteras chinas. Por poner un ejemplo, las producciones norteamericanas ingresaron más de 2.800 millones de dólares en el mercado chino, mientras que las producciones chinas a duras penas sumaron varias decenas de millones en Estados Unidos. Si quiere ser el nuevo Hollywood, eso es algo vital.

Parece que a Xiaohui le interesa más la imagen interna, algo que va en la línea del comité ético para la indsutria cinematográfica china que se está preparando. Con él quieren evitarse escándalos como el de Fan Bingbing, la actriz china mejor pagada que fue acusada de evasión de impuestos y estuvo en paradero desconocido durante varias semanas, que llevan a la cancelación del estreno de los próximos estrenos con sus protagonistas.

Imagino que en los planes de Xiaohui seguirá habiendo hueco para cintar como 'The Wandering Earth', una superproducción de ciencia-ficción, el último gran éxito del cine chino que lleva recaudados ya más de 650 millones de dólares desde su estreno a principios de año, aunque si por él dependiera seguro que todo serían producciones que se centren en defender la ideología del comunismo chino.

Imagen | CN Focus