Hace poco os hablábamos de la renovación por parte de la FOX americana del reality ‘Hell’s Kitchen’, y precisamente ahora venimos a hablaros de otro reality también de cocina e igualmente conducido por el chef Gordon Ramsay. Y es que Nova estrena esta noche nuevos episodios de ‘Pesadilla en la Cocina’, un reality que en vista del tiempo que llevan emitiéndolo en el prime time de los jueves no les debe estar funcionando nada mal.
Desde hace un tiempo, la cadena de corte femenino del grupo Antena 3 llevaba reponiendo los mismos episodios del reality, los cuales se han visto ya muchas veces, pero desde esta noche veremos nuevas entregas que corresponden a la tercera temporada. Es un programa que encaja muy bien con el espíritu de la cadena en que se emite, sus derechos les deben salir mucho más barato que los de cualquier serie, y encima es la mar de entretenido.
Así que quien aún no haya visto ‘Pesadilla en la Cocina’, debería acercarse a él porque engancha fácilmente. Se supone que se trata de un reality de cocina, pero realmente de cocina vemos poco. Es más bien un cruce entre “couch” y “makeover” en el que un cocinero muy peculiar, Gordon Ramsay, acude a un restaurante al borde de la quiebra y ayuda a sus dueños y empleados a levantarlo y llevarlo al éxito.
La estructura del episodio tipo de ‘Pesadilla en la Cocina’ es casi siempre la misma, pero no por ello se hace repetitivo. Ramsay llega y critica todo lo habido y por haber, desde la decoración hasta el menú o las estrategias promocionales. Se hace hincapié en cómo prueba la comida y todo le parece vomitivo, especialmente cuando se pasa por la cocina a revisar alimentos en mal estado. Después observará cómo funcionará el restaurante en un día normal para acabar diciendo que ese es el peor restaurante en que jamás haya estado.
Entonces Ramsay busca el problema, que suele ser un camarero vago, un dueño mal gestor o un cocinero desmotivado, y lo solventará provocando un cambio mágico en el funcionamiento del restaurante. Este giro viene acompañado de un cambio en la decoración del restaurante y un estreno al público de la nueva etapa del local que, claro está, será un éxito.
Esas son las claves de un formato que, así contado parece muy soso, pero en el que su verdadera arma es el protagonista, el chef Gordon Ramsay, que no se corta en gritar y montar el espectáculo allá por donde va. Llega a cualquier sitio como un huracán y él solito levanta el programa y te mantiene pegado a la pantalla. Si no te lo crees, prueba a verlo.
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