El estreno de 'The Witcher: El origen de la sangre' este pasado domingo en Netflix parecía la oportunidad perfecta para revitalizar la franquicia. El duro golpe recibido por el anuncio de la marcha de Henry Cavill tras las temporada 3 de 'The Witcher' creó ciertas dudas sobre su futuro, las cuales ahora han ido a más por la sensación de que todo el mundo está odiando esta precuela de las aventuras de Geralt de Rivia.
Solamente hace falta echar un vistazo a la recepción que ha tenido en Rotten Tomatoes para que quede claro que 'The Witcher: El origen de la sangre' ha puesto de acuerdo a crítica y público en lo mala que es: apenas un 38% de las valoraciones de la prensa especializada son positivas, porcentaje que baja aún más en el caso del público, donde apenas consigue un 8%.
Eso supone un contraste durísimo con 'The Witcher', que marca un 81% de valoraciones positivas de la crítica y un 75% de buenas opiniones del público. Obviamente, esto solamente refleja la opinión de parte del público, pero es que la cosa tampoco cambia mucho si acudimos a otros sitios web especializados.
Por ejemplo, 'El origen de la sangre' tiene una nota media de 4,3 de los usuarios de Filmaffinity y un paupérrimo 0,6 sobre 10 entre los de Metacritic -allí la crítica es algo más amable, pero también suspense con un 47 sobre 100-. por no hablar del 4 sobre 10 en IMDb. El consenso es claro, y es negativo.
Cosa distinta es que 'The Witcher: El origen de la sangre' acabe siendo o no un éxito de audiencia. Ahí juega en su contra que apenas sean 4 episodios por la métrica que utiliza Netflix, aunque por ahora ha debutado en el número 1 en varios países, incluyendo Estados Unidos. Eso sí, en otros no ha tenido tanta suerte y no estamos hablando de una serie precisamente barata...
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