Las salas de cine están manteniendo una férrea postura contra Netflix por la política de la plataforma de no respetar el habitual tiempo de espera entre el paso por salas de las películas y su disponibilidad en otras vías. Un nuevo estudio encargado por la asociación de dueños de cines norteamericanos concluye que los servicios de streaming no están matando el modelo de distribución convencional.
El estudio incluyó a 2.500, un 80% de las cuales vieron al menos una película en cines durante los 12 últimos meses, y todo apunta que el streaming funciona más como un complemento para aquellos espectadores que se acercan de forma regular a su sala más cercana. De hecho, Phil Contrino, director de la asociación que había encargado el estudio y que hasta ahora se había mostrado muy en contra de Netflix, ha apuntado lo siguiente tras conocer los resultados:
El mensaje aquí es que no hay una guerra entre el streaming y la distribución en salas. La gente que ama el contenido lo está viendo a través de varias plataformas y todas ellas ocupan un lugar en la mente de los consumidores.
Para ser más concretos, las personas que acudieron más de nueve veces al cine durante los últimos doce meses consumieron más obras en streaming que aquellos que solamente fueron a su sala más cercana una o dos veces durante el último año. En concreto, los primeros promediaron un consumo de 11 horas diarias en streaming frente a 7 de los segundos. Otro dato interesante es que casi la mitad de aquellos que no fueron al cine durante ese periodo tampoco recurriendo en ningún caso al streaming.
Ni siquiera entre los más jóvenes se produce ese temido abandono de las salas para pasarse al streaming, pues los encuestados entre 13 y 17 años fueron a ver un promedio de 7,3 películas en salas y además consumieron 9,2 horas de contenido en streaming, la cifra más alta de cualquier sector de edad.
No obstante, de algún sitio están teniendo que sacar el tiempo y parece que la gran sacrificada está siendo la televisión por cable. En 2018 se espera un aumento del 32,8% entre aquellos que cancelaron alguna vez este tipo de servicios, elevando así la cifra hasta los 33 millones de adultos. Como ya apuntábamos hace unos días, ahí es donde Netflix está haciendo daño a sus rivales.
Vía | Variety
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