Reed Hastings, CEO de Netflix, ha tardado poco más de once meses en hablar públicamente de uno de los temás más polémicos de 2019: en enero pasado, la plataforma censuró un episodio de 'Patriota no deseado' en Arabia Saudí que se centraba en la familia real saudí y sus entresijos de poder con la excusa de la misteriosa muerte de un periodista.
Autorregulación la llaman
El jefazo de la compañía, ha hablado en un reciente evento del The New York Times poniendo las cosas claras con la política de Netflix, avisando que no están en el negocio de denunciar al poder con la verdad y que, por tanto, admiten este tipo de requerimientos.
"No estamos en el negocio de plantar cara al poder con la verdad, estamos en el negocio del entretenimiento. Podemos lograr mucho más siendo entretenimiento e influenciando una conversación global sobre cómo vive la gente que siendo otra cadena de noticias. Si viniesen a nosotros y nos dijeran que no podemos tener contenido gay, no lo haríamos. Eso no lo podríamos acatar.
No es la primera vez que Hastings tiene que hablar de censura (o autocensura) en territorios internacionales. Hace unos meses habló sobre la necesidad de autorregularse para evitar conflictos con los gobiernos. Lo hizo a propósito de 'Juegos sagrados', su primera serie original en La India, con la que tuvo que capear una denuncia por presuntos insultos al anterior Primer ministro de la nación:
"Nadie quiere una regulación gubernamental estricta sobre el contenido. Pensamos que podemos ser más flexibles y proteger la libertad creativa mejor si somos un poco proactivos."
Creo que Hastings tiene algo de razón en el sentido de que no son una empresa de noticias y que, por tanto, no se les pide contenido político. Sin embargo, si tienes contenido como el programa de Hasan Minhaj, hay que respetar a los que contratas para hacerlo. Y el modo de respetarlos es manteniendo íntrego su discurso.
Netflix no es la única empresa preocupada por la censura y "autorregulación" en sus expansiones territoriales. Todas las grandes, de Apple a Disney, andan con mucha cautela a la hora de producir contenidos que se consuman en China, India, Rusia, Oriente medio y otros países y regiones mundiales.
Y no solo en estos países, recordemos que este pasado verano Netflix decidió también deshacerse de "desencadenantes" en algunas de sus series más conocida: eliminará el tabaco de 'Stranger Things' (y de sus futuras series) y aplicó tijeretazo en la escena del suicidio de Hannah en 'Por trece razones'.
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18 comentarios
pos_soy_yo
Recordemos que hace unos días Netflix dejó de contratar a ABC para poner su publi (sí, yo tampoco sabía que se publicitaran en prensa escrita) por un anuncio "homófobo" que publicó dicho diario y ahora ese mismo Netflix tan super progre de puño arriba nos sale con la censura en Arabia Saudí. No veáis la de cazurros que aplaudían con las orejas la noticia de quitar la publi de ABC pero que de esta ni se van a enterar, o total, no les interesa. Ya sabemos como funcionan las cosas, ya no se trata de "fake news" se trata de que la gente quiere oír lo que quiere y lo demás no interesa, no vaya a ser que queden como patanes por defender a una multinacional que se mueve según sopla el viento (al fin y al cabo gran parte de su negocio viene de ahí).
https://www.ecartelera.com/noticias/netflix-veta-abc-57410/
halleck
Y asi señores es como cae Occidente
doomer
"Nuestro negocio no es plantar cara al poder, es entretener" … nadie lo diría.