Netflix va camino de su mayor éxito hasta ahora con su thriller coreano 'El juego del calamar', que ha mantenido su lugar en la cima de las listas diarias de la plataforma de los más visto, una audiencia masiva genial para la serie pero que ha generado una situación de pesadilla para un residente de la provincia de Gyeonggi que tiene el mismo número de teléfono que aparece varias veces en la trama.
Una pesadilla que puede tener final feliz
El número de teléfono en cuestión aparece en las tarjetas de presentación que el misterioso reclutador de Gong Yoo entrega a las personas lo suficientemente desesperadas como para intentar unirse al desafío que pone en riesgo la vida con la esperanza de ganar un día de pago monumental. Como suele suceder, cuando el público ve un número de teléfono dentro de un programa de televisión o una película, tienden a llamarlo por si acaso está relacionado con la trama. En este caso el número pertenece a un hombre que está viviendo una pesadilla.
El hombre que actualmente está lidiando con esto, que supuestamente tiene 40 años, afirma que, además de un montón de mensajes de texto, recibe alrededor de 4.000 llamadas al día, que no solo son durante del día sino que llegan hasta la mitad de la noche. Primero pensó que estaba relacionado con algún tipo de broma o estafa de spam, con personas que decían que querían estar "en el juego", pero luego se enteró por una de ellas que el número era parte de la serie de Netflix.
El problema es que el hombre ha usado ese número de teléfono durante aproximadamente una década, según el South China Morning Post, y también está relacionado con su negocio, por lo que cambiarlo no le conviene nada. Además, su esposa aparentemente también está recibiendo llamadas por equivocación ya que su número es el mismo excepto por el último dígito. Se están llevando a cabo negociaciones para encontrar una manera de resolver el problema, pero el caso ha llegado hasta la política.
Un candidato político de un pequeño partido ha hecho una oferta para comprarle el número al hombre. Huh Kyung-young, del Partido Revolucionario Nacional, publicó en las redes sociales que estaría dispuesto a pagar 100 millones de wones por el número, lo que equivale a unos 85.000 dólares estadounidenses. Pese a lo complicado del asunto en relación a la protección de datos, nadie se dio cuenta del problema durante la fase de producción, pero al no aparecer el nombre del usuario del número no se contempla en la protección de datos.
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