La pregunta es ésta: "¿Os ofende como espectadores cuando se dice que España tiene la TV que se merece?"
Mi respuesta: que no me ofende en absoluto, porque es una verdad como un templo (aunque con un matiz que luego explico). Las televisiones comerciales buscan una sola cosa: beneficio económico. Y ese beneficio lo obtienen de conseguir los mayores ingresos con los menores gastos. Por lo tanto, buscarán emitir aquellos programas con los que consigan audiencia (=ingresos publicitarios), invirtiendo para ello lo menos posible. Ejemplo: compremos una serie y emitamosla, a ser posible con muchos bloques publicitarios. Cuando haya terminado, volvamos a emitirla una y otra vez, sin orden ni concierto, a cualquier hora. Y siempre con muchos anuncios. O hagamos un "reality" con cuatro perras, encerremos a cuatro descerebrados (famosos o no) ante las cámaras y hagamos que toda nuestra programación de mañana, tarde y noche gire entorno a ese programa. O sentemos a cuatro presuntos periodistas en unas sillas con un decorado de cartón piedra, pongamos a un desgraciado delante de ellos y démosle vueltas a si le fue infiel a fulanito o a menganita, y luego invitemos a su padre, o a su hermano, o a la chica que se dio un morreo con él cuando tenían 15 años, y denle su media hora de gloria. Es más, hagamos que nuestra programación de mañana, tarde y noche del resto de la semana se base en eso.
Si las televisiones hacen eso es porque hay audiencia que las respalda. Si la audiencia respaldase series de calidad, pondrían series de calidad. Si respaldasen espacios de reflexión profunda, irían directos al prime-time. Somos nosotros, el conjunto de telespectadores, los que respaldamos una televisión u otra, y por lo tanto directamente los responsables de lo que nos echan. Ya sé que muchos lectores del blog dirán que ellos no tienen la culpa de lo que "la mayoría" quiere ver... pero amigos, esto es una "democracia" regida por el mercado.
Antes hablaba de un matiz, que creo que es importante, y es la televisión pública. Ésta debería guiarse por otros criterios distintos de la rentabilidad económica. Es más, no me preocuparía que la televisión pública fuese deficitaria... eso sí, si juega a desmarcarse de la televisión comercial. Pero si juega a televisión comercial, entonces al menos que no nos hagan perder dinero...