Estos días estamos asistiendo a una nueva racha de incendios en California. Parece que de forma periódica se desatan estos cúmulos de desastres en la zona, que requieren de un gran despliegue para poder controlarlos. Y que, debido a su magnitud, afectan a la vida diaria de sus habitantes, a sus casas, a sus trabajos. Y teniendo en cuenta la potente industria audiovisual del estado de California, el mundo de la televisión también se ve afectado por las llamas.
Así, los estudios de Santa Clarita vieron afectada su actividad al principio de la semana. No tanto por ser afectados directamente por el fuego (aunque los empleados afirman que se podía ver el humo de alguno de los focos de los incendios) sino por el caos circulatorio derivado del mismo, y debido a que algunas personas que vivían por la zona sí estaban viéndose obligados a evacuar sus casas. Las series NCIS (el CSI de la Marina) y The Unit se vieron afectadas en su rodaje.
También la séptima temporada de 24 se vió afectada, al tener que interrumpir el rodaje en la base aérea de los Marines en Irvine, debiendo cambiar la planificación del rodaje para poder ir a rodar a otras localizaciones. En esa misma tesitura se vieron los productores de otros programas, que también tuvieron que alterar sus planes ante las dificultades provocadas por los incendios.