Hay directores con mejor habilidad que otros para transicionar a otros tiempos, a otros ritmos y técnicas cinematográficas, o cuyo estilo se traslada mejor a través del tiempo. Otros, sin embargo, van realizando películas que se sienten fuera de tiempo, a veces para mal porque quedan indefinidas. En ocasiones para bien, con su pulso todavía firme para que sus formas sigan sintiéndose vitales y engrasadas, como sucede en 'Primera plana' ('The Front Page').
Unas rotativas que no paran
Billy Wilder entrega su última obra realmente imprescindible en esta adaptación teatral que satiriza con so voz característica el mundo del periodismo y la corrupción urbanística. El dúo maravilla de Jack Lemmon y Walter Matthau son los protagonistas de esta fabulosa comedia que se puede ver hoy en televisión a través de La 2 a partir de las 22 horas de la noche (también en streaming a través de Filmin).
Es la Chicago del año 1929, y un hombre espera la confirmación de su condena de muerte o un indulto por parte del juez. También esperan la noticia un grupo de reporteros a las puertas del Tribunal Supremo. Pero en el Chicago Examiner su cronista de sucesos está deseando contraer matrimonio y dejar la profesión, algo que su editor tratará de evitar para poder estar al pie de la noticia del momento.
Wilder retoma este proyecto soñado varias décadas después del estreno de la obra original y de que hubieran varias adaptaciones para cine y televisión, como la película ‘Luna nueva’ con Cary Grant. A diferencia de aquellas, el director y sus co-guionistas deciden recuperar cierta especificidad de la obra original, nombrando directamente Chicago y retomando mucho del cinismo que poblaba instituciones y profesiones como el periodismo.
Es un espíritu crítico que va muy bien con la renovación que estaba proponiendo el nuevo Hollywood de la época, con más amargura y personajes más correctos. Pero en términos de tono y ritmo, Wilder no se pliega a tendencias, y muestra de nuevo su maquinaria funcionando a pleno rendimiento con un guion perfiladísimo, una comedia siempre punzante e inteligente, y una gran dirección de actores.
Estaba claro que se iba a entender con una pareja tan particular como Lemmon (con quien colaboró casi decenas de veces) y Matthau, pero también saca oro de un nutrido plantel de secundarios, que mantienen siempre las risas activas en el espectador. Es por ello que se mantiene ‘Primera plana’ como un tesoro atemporal, en el mejor sentido posible.
En Espinof | Las mejores comedias de la historia
En Espinof | Las mejores películas de 2024
Ver 1 comentarios