La nueva televisión pública española llega sin grandes cambios sustanciales, tras la supresión completa de publicidad desde el 1 de enero de 2010. El cambio más grande es el aumento de la duración de los informativos, que seguro seguirán siendo líderes de audiencia, y la supresión de algún que otro programa como 'Gente', aunque sin embargo, aumentarán la duración de 'España directo' una hora más.
Y hablando de 'Gente', cuando cancelan un programa siento una gran tristeza por los profesionales que se quedan sin trabajo, un hecho que parece no preocupar a nadie que está delante ni detrás de la pantalla, pero tras cada programa cancelado hay muchos trabajadores que se van a engrosar las listas del paro de este país, la mayoría de ellos, de productoras externas hasta que encuentran una nueva producción. Por otra parte, creo que el formato de 'Gente' está más que agotado y ha perdido mucho interés. La crónica de sucesos del corazón no debería tener espacio en una televisión financiada con fondos públicos por puro interés público, al igual que creo que también deberían suprimir el espacio del longevo 'Corazón, corazón'.
Realmente no se potencia tanto la producción propia de TVE, al menos en el primer canal y durante esta primera época del año. La 2 se encargará de la mayor parte de servicio público que estipula la ley. Allí tendrán debates parlamentarios, espacios para minorías sociales y participación ciudadana. Además, el prime time de La 2 cada noche emitirá una película de producción europea, independiente o de autor.
En TVE 1 se mantienen: 'Comando actualidad', '59 segundos', 'Españoles por el mundo', la Champions League, las series nacionales, 'La hora de José Mota', 'Informe Semanal y 'Versión Española', éxitos que les han reportado siempre buenos datos a TVE para ser los líderes. Se estrenarán 'Gran Reserva' y 'Un país para comérselo'. Como veis, no hay innovaciones que nos llamen demasiado la atención.
Todos estos programas tienen su público, están asentados en nuestra pantalla y funcionan, como ya digo, entre su público. Pero esa tremenda revolución que prometían parece, a priori, no ir más allá de la supresión absoluta de publicidad. Es en este caso cuando me acuerdo de toda la oferta de televisión pública que existe por Europa: canales como la británica BBC o la alemana ZDF y sus contenidos temáticos... contenidos que no tienen nada que ver con los nuestros, supongo que por motivos culturales, porque por motivos de producción ya no debe haber excusa. ¿Es una falta de ideas el problema que tenemos?
Vía | El País En ¡Vaya Tele! | TVE reducirá su publicidad, aunque no sabemos como