Que nuestra televisión se mueve según el éxito que alcancen otros es una premisa que ha marcado lo que vemos en pantalla en los últimos años. Se copian formatos, ideas y puestas en escena, dependiendo de si la cadena vecina ha logrado sacarle rendimiento a un programa con las mismas características. Desde formatos musicales hasta espacios de reportajes, todo es susceptible de ser imitado en televisión, algo que también se ha plasmado con los programas de competición culinaria que hemos visto durante 2013 en nuestra televisión.
'MasterChef' y 'Top Chef' son dos apuestas que han marcado la parrilla televisiva de sus respectivas cadenas, sin pasar desapercibido y logrando el éxito necesario para confirmar una segunda edición en el futuro. Después de que hayamos observado cómo han transcurrido ambos espacios, es hora de enfrentarlos exhaustivamente a la inevitable comparación, para examinar cuáles son los puntos fuertes de cada uno y, aunque se pueda ser seguidor de los dos, llegar a una única conclusión: ¿Qué talent show es mejor que el otro?
Quien golpea primero golpea dos veces
En España ha pasado algo curioso con respecto a 'MasterChef' y 'Top Chef', ya que el programa de la cadena pública ha llegado antes a nuestro país pese a que se trata de un programa creado más tarde que 'Top Chef', que cuenta con más años de recorrido fuera de nuestras fronteras. Este dato parece que no importa demasiado a la hora de designar a 'Top Chef' como una "copia" de 'MasterChef' entre la mayoría de la audiencia, que solo se atiene a lo que ha visto en primer lugar y se olvida de futuros formatos que puedan llegar con posterioridad.
Estrenar un programa de éxito el primero consigue este efecto entre los espectadores, ya que habrá una parte de la audiencia que siempre verá los sucesivos espacios como copias y tenga recelos a la hora de engancharse a ellos. Por eso, aunque ambos programas tengan un corte similar, en esta comparación no podemos dejar de valorar que 'MasterChef' se estrenara en primer lugar, provocando que, tomara el camino que tomara, 'Top Chef' siempre se viera en nuestro país como un duplicado del talent show de la cadena pública. 'MasterChef' 1 - 'Top Chef' 0.
¿Presentador? No, gracias
Uno de los puntos más criticados en 'MasterChef' fue la presencia de Eva González como presentadora. Las críticas no iban tan centradas a su manera de conducir el espacio, sino a la escasa falta que le hacía a un programa de estas características contar con un presentador. En 'MasterChef', la conducción de Eva González era tibia, aportaba bien poco y su papel podía ser absorbido perfectamente por los miembros del jurado, un recurso que sí se utilizó en 'Top Chef' al colocar a Chicote como miembro más destacado del jurado y como conductor del programa, una decisión acertada que le daba más agilidad al formato. 'MasterChef' 1 - 'Top Chef' 1.
Jurado estricto pero cercano
El papel del jurado es crucial para que un talent show funcione hoy en día en la televisión. Lo hemos visto en programas con otras temáticas y en la competición de cocina no podía ser menos. Tiene una doble función. Por un lado, cada miembro debe mostrar severidad con las valoraciones y mostrar un juicio que se distinga de los demás, pero por otra parte también debe saber conectar con el público, crear un enlace de empatía que no se difumine con facilidad, lo que puede llevar al espectador a abandonar el programa.
En este punto, la omnipresencia de Chicote durante todo el programa ha terminado saturando, mostrando cierta exageración de su papel como jurado estricto que no ha encajado al 100%. Tampoco ha ayudado pasar a Ángel León y Susi Díaz a un segundo plano, en ocasiones relegando su presencia a meros espectadores donde su total implicación no quedaba latente. En este sentido 'MasterChef' sí supo presentar un jurado mucho más compacto, aunque con una Samantha Vallejo-Nágera más floja que el resto, pero con una complicidad que no se perdía a la hora de valorar cada plato. 'MasterChef' 2 - 'Top Chef' 1.
Un casting para conectar con la audiencia
El siguiente punto se disputa en el casting, otro de los elementos esenciales para que un talent show funcione. La diferencia presentada en ambos programas estaba clara. 'MasterChef' se decantó por unos concursantes amateurs, aficionados al mundo de la cocina que llegaban a la competición con ganas de aprender y mostrar sus habilidades. Mientras, 'Top Chef' quería explotar a los cocineros avanzados, con una trayectoria profesional a sus espaldas y con la capacidad y las ganas de enfrentarse a retos más complejos.
Aunque en un principio podamos pensar que los concursantes profesionales pueden dar más juego, lo cierto es que a la hora de enfrentarse a cada prueba el factor cercanía vuelve a ganar la partida. De cara al espectador, ha sido mucho más cercano, tierno y divertido ver a los amateurs cocinando y enfrentándose a los retos que 'MasterChef' les tenía preparado. Las alcachofas de Maribel, la tarta de Cerezo o los postres de Fabián fueron elementos con los que la audiencia se podía sentir representada, gracias a una serie de personajes que podían ser la imagen de cualquiera de los espectadores que estuvieran viendo el programa. 'MasterChef' 3 - 'Top Chef' 1.
Mejor pruebas con sorpresa
En el desarrollo de las pruebas también hemos visto que ambos programas se han distanciado. En 'MasterChef' el reto era conseguir algo con cierta dificultad, pero 'Top Chef' ha optado por el desarrollo de las pruebas con la introducción de esa jugarreta final dispuesta a cambiarlo todo. Ese elemento sorpresa ha jugado a favor del talent show de Antena 3, otorgando un punto de atracción extra que ha caracterizado al programa. Superar los retos siempre es interesante de cara al espectador pero son más seductores cuando cuentan con esa dosis de dificultad que hace que la audiencia disfrute aún más con las idas y venidas de la competición. 'MasterChef' 3 - 'Top Chef' 2.
Sin anuncios, un punto extra
Aunque las cadenas privadas no lo tengan muy en cuenta hoy en día, el espectador agradece que un programa acabe a una hora decente y que no se alargue con anuncios interminables o extendiendo al máximo los momentos de tensión. En este punto, 'MasterChef' juega con un elemento a su favor: emitirse en una cadena sin publicidad. Seguir la competición sin cortes de por medio es una experiencia que se disfruta aún más, una ventaja a su favor con la que es muy difícil luchar y que sin embargo puede ser una característica más a la hora de que un espectador prefiera un programa por encima de otro. 'MasterChef' 4 - 'Top Chef' 2.
Termina el partido con la victoria clara de 'MasterChef' sobre 'Top Chef' aunque, como dije al principio, preferir uno por encima de otro no debe ser razón suficiente para no ser espectador de las dos competiciones por igual. Yo, al menos, espero con ganas la vuelta de ambos programas. Y vosotros, ¿estáis de acuerdo con el resultado de la comparación?
En ¡Vaya tele! | 'Top Chef', cuando la cocina sí puede ser espectáculo
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