La Primera siguió el formato francés de una manera bastante fiel, con el entrevistado de pie ante un atril y los entrevistadores sentados como en una especie de graderío. Al igual que ocurrió en Francia, menos de la mitad de los ciudadanos tuvieron oportunidad de preguntar. En declaraciones a la SER que recoge El Mundo, Lorenzo Milá, que moderaba la entrevista, afirmó que le decepcionó un poco el desarrollo de la misma, pues esperaba más cercanía por parte del presidente, si bien, según fue avanzando el programa, éste se soltó un poco más. Milá también recordó que, en general, los políticos españoles no suelen comportarse con naturalidad y cercanía en la televisión y están demasiado atrapados por sus personajes. El próximo 16 de abril será el turno de Mariano Rajoy, el líder del PP.
Vía | Vertele En ¡Vaya Tele! | Cien ciudadanos entrevistarán a Rajoy y Zapatero