La categoría de mejor miniserie de las nominaciones de este año de los Emmy se ha quedado reducida a sólo dos candidatas: 'Generation Kill', la adaptación, a cargo de David Simon, del libro de Evan Wright sobre un grupo de marines estadounidenses al principio de la guerra en Irak, en 2003, y 'Little Dorrit', otra adaptación literaria, pero de una novela de Charles Dickens que, aunque esté ambientada a finales del siglo XIX, trata un tema con mucha vigencia en la actualidad; la atracción, el poder y la desgracia que las fortunas traen consigo. Y fortunas entendidas tanto como dinero, como en su acepción de suerte, o azar.
La principal protagonista de la serie es Amy Dorrit, nacida en una prisión para morosos en la que su padre lleva encerrado media vida, sin que sepamos, al principio, las razones de las deudas que lo llevaron allí. Amy, conocida como "La pequeña Dorrit", entra en contacto con la familia Clennam y con su primogénito, Arthur, que regresa de una larga estancia de negocios en China tras el fallecimiento allí de su padre, y con el mensaje que él le entrega en su lecho de muerte: "Tu madre, Arthur. Arréglalo". Clennam empieza a sospechar que su familia puede tener alguna relación con los Dorrit, y empieza a investigar. Ésas son las líneas principales de una trama con muchas más ramificaciones y personajes, que van confluyendo poco a poco con el correr de los capítulos.
'Little Dorrit' sigue el esquema que su guionista, Andrew Davies, ya utilizó, con mucho éxito, en otra adaptación de Dickens, 'Bleak House', en 2005. Se estructura en 14 capítulos de los que el primero y el último duran una hora y los demás, 30 minutos, y que se programaron en el Reino Unido a la manera de las soap operas, dos noches a la semana. En Estados Unidos, por su parte, se emitió en la PBS en cinco episodios. La estructuración británica es, según sus responsables, más fiel al modo en el que Dickens publicaba sus novelas, por entregas mensuales, procurando siempre que el final de cada tuviera un giro, un cliffhanger que te llevara a adquirir la siguiente. Esa circunstancia también se mantiene en la serie, aunque algunas de las múltiples subtramas no terminan de estar bien hiladas.
No obstante, la principal atracción son sus personajes, todos interpretados a la perfección por un extenso reparto lleno de caras conocidas y todos movidos, en mayor o menor medida, por el dinero, ya sea sus ansias de mantenerlo, sus problemas para ganarlo y librarse de las deudas, la carga que puede suponer administrarlo y los "parásitos" que pueden surgir a su alrededor. Además, Dickens también aprovecha para criticar la absurda burocracia que rodeaba a las oficinas gubernamentales que trataban la resolución de deudas, una burocracia que, en parte, sigue en la actualidad.
En resumen, que 'Little Dorrit', además de tener una gran ambientación que distingue perfectamente los escenarios por los que se mueven las clases altas y las bajas, destaca por unos personajes y unos actores redondos y perfectamente creíbles, y una peculiar mezcla de géneros (empleada también en 'Bleak House') que lo mismo une el drama social con las historias de amor con el thriller, todo en un único episodio. Por ahí, a veces, se le va la fuerza a la serie, pero sigue siendo muy recomendable, y muy difícil de abandonar una vez que te atrapa.
Web oficial | Little Dorrit (BBC) En ¡Vaya Tele! | Una breve guía de las adaptaciones literarias de la BBC