Todos queremos creer tener una perspectiva única, una capacidad de pensamiento y abstracción que se sale de la norma y de una supuesta mediocridad que sólo afecta al resto. Pero nunca somos tan originales como pensamos, y al final las normas y constructos sociales están demasiado bien diseñados para que podamos escapar del rebaño o, simplemente, acabar recorriendo el mismo camino que el resto.
Por ejemplo, aunque nos veamos con cierta perspectiva y libertad para criticar lo que hacen otras parejas de nuestro entorno, la mayoría de las veces terminamos tropezando con sus mismas piedras. Sea el acomodamiento rutinario o meterse en infiernos insufribles como es el mercado inmobiliario. Sobre esas cosas trata muy bien una de las joyas de ciencia ficción que más han pasado bajo el radar pero que es de las más frescas y originales. Y se puede ver en HBO Max. Se trata de 'Vivarium'.
La casa de tus sueños (o de tus pesadillas)
Esta peculiar producción irlandesa sigue a una de esas jóvenes parejas, interpretada por Imogen Poots y Jesse Eisenberg, que sienten que deben ir dando el siguiente paso comprando su propia residencia. Por supuesto, el mercado es algo complejo y nada de lo que encuentran se ajusta a sus necesidades. Por ello, visitan una peculiar agencia inmobiliaria para ver si encuentran algo interesante, pero lo que se topan son modelos de casas clónicas y carentes de personalidad -aunque también un poco repelentes por sus tonos chillones-.
Embaucados por el agente inmobiliario que les atiende, se acercan a la urbanización en la periferia, para toparse con que realmente todas las casas son como los modelos: clónicas, aparentemente vacías -de alma y de personas- y hasta laberínticas. El vendedor les promete que la vivienda unifamiliar será una de esas "para toda la vida", y aunque ellos no están convencidos se darán cuenta de que no era un eslogan. Literalmente se encuentran atrapados en los suburbios, y empezarán a suceder fenómenos aún más extraños.
El director Lorcan Finnegan consigue crear una pesadilla actual y muy real, a pesar de los elementos muy estrafalarios que vemos desarrollados. Sin entrar en muchos detalles vemos monotonía, estancamiento en roles inesperados, un infante misterioso que empezará a trastocar la dinámica de la pareja. No hace falta dar demasiadas vueltas a la mente para entender de qué está hablando, aunque sus misterios van acumulando capas de significados muy sugerentes.
'Vivarium': dimensión desconocida
Con estilismos muy modernos y bastante creatividad para los pocos recursos de los que dispone, 'Vivarium' logra funcionar especialmente por la manera en la que bebe de la ciencia ficción clásica más modesta, aquella con la que Rod Serling nos invitaba a fantasear cada noche en 'La dimensión desconocida'. Aquella que apela el espectador hablándole de cosas que le inquietan a través de alegorías muy creativas dentro de las limitaciones.
La forma en la que habla no sólo de la aterradora aventura de encontrar tu propia casa, sino de la tendencia irrevocable hacia el acomodamiento, de la adopción de roles familiares de manera inconsciente, de cómo el sistema nos conduce hacia ellos por cómo se nutre de los mismos o del erosionamiento que se termina produciendo resulta muy refrescante y contundente. Su manera de articular la crisis de la adultez en el relato fantástico la convierten en una verdadera pieza de terror moderno. Una que no debería seguir pasando bajo el radar como lo hizo en su estreno.
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