Hay pocos directores en Hollywood que tengan libertad para hacer un poco lo que sea que les venga en gana, pero uno de ellos es Robert Rodriguez. Director desde películas tan oscuras como 'Sin City' a cintas familiares 'La piedra mágica', su rango es digno de alabanza.
Situada más o menos en el medio a nivel de tono está 'Pistolero (Desperado)', un estupendo neo-western disponible en Max México que, muy en el principio de la filmografía del director, ya demostraba que era uno de los cineastas más interesantes de su generación.
La cinta es la segunda parte de la llamada "trilogía de El Mariachi", que comienza con 'El Mariachi' y termina con 'Érase una vez en México'. La evolución de este proyecto fue muy curiosa, con la primera siendo una de las sorpresas de su año pese a estar rodada con tan solo 7.000 dólares, y la tercera llegando recaudar 97 millones de dólares, el triple de su presupuesto.
Ambientada en un pequeño pueblo mexicano, la historia sigue a un mariachi en búsqueda de venganza por la muerte de su esposa, lo que le lleva a enfrentarse a Bucho, un narcotraficante local. Antonio Banderas interpreta a dicho músico en lo que es una continuación de la historia de la original.
A primera vista sin embargo sería difícil decirlo. 'Desperado' tuvo un presupuesto mucho más grande que su predecesora, y eso se nota tanto en su puesta en escena como en sus intérpretes. A Banderas se le une Salma Hayek y Steve Buscemi. Y cuenta con la presencia de colegas habituales en su filmografía como Quentin Tarantino y Danny Trejo.
"La transición comercial ha sido exitosa. Sobre todo gracias a Rodriguez, que no solo mantiene la energía kinética de la original, sino que la lleva más lejos", escribían en Washington Post. Al humor pícaro y las imaginativas secuencias de acción se le une un mítico número musical inicial de Banderas. El actor es uno de los reclamos principales que hacen de la película un visionado necesario para amantes del western que quieren ampliar fronteras.
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