Hace unos días, cuando se anunció que 'Black sails' terminaría su emisión en Starz en la próxima temporada, nosotros dimos la noticia diciendo en el titular que la serie había sido cancelada. Y varios comentaristas apuntasteis que, al leer dicho titular, habéis pensado que la cadena la había "liquidado" sin muchas contemplaciones. "No está "CANCELADA", han decidido finalizar la historia ahí. Que manía que cuando termina una serie se considera CANCELADA", señalaba srturk, y lo cierto es que no le faltaba razón.
Tal vez el caso más paradigmático en los últimos meses de esta confusión de términos fuera el de 'Penny Dreadful'. La serie de Showtime cerró, por sorpresa, su tercera temporada de un modo muy definitivo (hasta con un "The End") y su creador, John Logan, dio después varias entrevistas en las que confirmaba que la historia había llegado, efectivamente, al final. Pero en todas partes se hablaba de que 'Penny Dreadful' había sido cancelada. ¿Cómo podemos distinguir, entonces, una cancelación de un mero final?
El caso de 'Black Sails'
Tomemos como ejemplo 'Black Sails', la serie que ha motivado esta entrada. La cadena anunció hace unos días que terminaría en su cuarta temporada, que se estrena el año que viene. Es de suponer que, con este margen, sus creadores han tenido tiempo de preparar el cierre de la historia, y aunque la decisión haya sido más empresarial que creativa (algo que no sabemos), da la sensación de que esta última parte se ha respetado un poco más.
Similares son los casos de 'Teen Wolf' (de la que se supo también en Comic-Con que su siguiente temporada, la sexta, será la última), 'The Vampire Diaries' y hasta 'Orphan Black'. El anuncio de sus finales se hace antes de que se estrene la nueva temporada o, directamente, cuando se renueva la serie por esa última entrega. Como decimos, puede haber sido la cadena quien haya decidido que las series tienen que acabar, pero los creadores pueden dar a sus producciones el cierre que quieran.
En esos casos, las series están "terminadas", han llegado a su final "natural", como si dijéramos. Incluso en títulos como 'The Good Wife', aunque el anuncio se hizo sólo unos meses antes del último episodio, quedaba muy claro que aquello no había sido una cancelación apresurada, sino que Robert y Michelle King habían podido escribir el final según sus propios términos.
La clave para diferenciar "final" de "cancelación" está un poco ahí, en que los guionistas hayan tenido tiempo (si es que ellos no lo han decidido) para pensar y escribir un cierre real para la serie.
La guillotina de la cancelación
En el otro lado, hay muchos ejemplos de cancelaciones. Las cadenas las anuncian a mitad de temporada, habitualmente, o cuando ésas ya han finalizado, y se decide echar el cierre por bajas audiencias (que es lo más habitual), problemas presupuestarios o, en raras ocasiones, por desavenencias creativas, como ha pasado recientemente con 'Vinyl' o como le ocurrió a Lifetime con Jennifer Love Hewitt con 'The Client List'.
En el caso de las cancelaciones a mitad de temporada (o al principio), no hace falta detallarlas porque todos estamos familiarizados con ellas. Y, francamente, son tantas, que hasta tuvimos hace años una sección que destacaba algunas de aquellas series inacabadas por culpa de una cancelación inmisericorde. Uno de los últimos ejemplos más flagrantes fue el de 'Faking it', de la que MTV anunció que no continuaba una semana antes de que se emitiera el final de su tercera temporada. Y hasta podría discutirse que algo similar le pasó a 'Vis a vis' en Antena 3, aunque nadie mencionó ese término.
No hay posibilidad de confusión cuando esto sucede, o cuando una serie recibe unas críticas tan horribles y tiene unas audiencias tan pésimas, que ni siquiera llega a emitir cuatro episodios. Pero, ¿y si se ve una temporada completa de la serie y la cadena espera un tiempo antes de anunciar que no habrá continuación? Pues sigue siendo una cancelación, porque el caso de 'Penny Dreadful', en el que no se avisó con antelación para preservar la sorpresa de los espectadores al ver el último episodio, es especial.
Ahí está, por ejemplo, 'Limitless', que CBS tardó semanas en anunciar oficialmente como cancelada. O 'Bunheads', cuyos fans soportaron una agonía de meses hasta que Freeform decidió confirmar sus temores de que no iba a seguir más allá de aquella primera temporada. La clave aquí suele estar en que el anuncio se hace con nocturnidad y alevosía.
¿Cancelada o finalizada?
¿Cuál es, entonces, el truco para distinguir una serie cancelada de otra que, simplemente, ha terminado? El visionado del último episodio suele ayudar, por supuesto, pero la clave está en cuándo se hacen públicos esos anuncios del final del programa. Si llegan con cierta antelación, y especialmente si se lanzan bastante antes de que se emita la última temporada, se puede afirmar que esa serie va a terminar según sus propios términos. Si, por el contrario, llegan con la temporada en emisión, o cuando ésta ya ha finalizado, lo más habitual es que estemos ante una cancelación que no puede disimular ni un final como el de 'Pushing daisies'.
Y luego están ejemplos más o menos híbridos, como 'Person of interest'. CBS anunció que la serie terminaba al mismo tiempo que daba la fecha de emisión de su quinta temporada, pero sus creadores ya habían rodado esos episodios como si fueran los últimos, sin que nadie les diera, oficialmente, esa noticia. Así que se puede decir que, aunque 'Person of interest' terminara de una manera bastante clara, al mismo tiempo había sido cancelada por CBS.
En ¡Vaya Tele! | Éstas son todas las series canceladas y renovadas en la televisión americana para 2016/17
Ver 16 comentarios