'El consejero', la película

Para bien o para mal —más de lo segundo que de lo primero, no hay duda— Ridley Scott estuvo en boca de todos en los días y meses que siguieron al estreno de su horrenda 'Prometheus' (id, 2012), un filme fallido de principio a fin que, cómo no, generó toda una ola de disensiones entre los que alababan la genialidad del cineasta británico y los que nos echábamos las manos a la cabeza ante la falta de coherencia interna de la producción y el poco respeto para con el universo al que se supone pertenece.

Ennfrascado como está en estos días en el rodaje de sus particulares Diez Mandamientos con Christian Bale, y mientras tememos por que los rumores acerca de la secuela de cierto filme con Harrison Ford sean ciertos, el próximo día 29 llegará a nuestras pantallas 'El consejero' ('The Counselor', 2013), una cinta con un reparto estelar que no ha cosechado muy buenas críticas al otro lado del charco, donde la han tachado de "rollo", afirmando que el guión de Cormac McCarthy, el primero que el escritor ha concretado ex-profeso para el cine, es "una historia pésima".

El argumento

Creyendo que podrá manejar la situación y salir airoso de ella, un respetado del sudoeste de Estados Unidos (Michael Fassbender) decide probar suerte como narcotraficante. Pronto se percatará que su elección no ha sido precisamente la más afortunada...

El director

Por más que el visionado de la muy estimulante 'Los duelistas' ('The Duellists', 1977) supusiera toda una sorpresa, poco podía imaginarse el mundo del séptimo arte lo que Ridley Scott le tenía reservado con su siguiente proyecto, una cinta de ciencia-ficción con monstruo que cambiaría por completo la concepción de lo que tal clase de idea podía dar de sí, amén de posicionarse como referente básico del género en años posteriores. Pero si 'Alien, el octavo pasajero' ('Alien', 1979) tuvo vital relevancia para la ciencia-ficción, lo de 'Blade Runner' (id, 1982) se puede calificar de hito histórico en el devenir del séptimo arte.

Con tales cartas de presentación, Ridley Scott lo tenía muy fácil para haber desarrollado una carrera en Hollywood que se hubiera acomodado en el género que tan buenos resultados le había dado pero, lejos de conformarse con dicha opción, el cineasta británico comenzó a tirarle los tejos a todo lo que se le ponía por delante, rodando durante los ochenta una singular e hipnótica fantasía con 'Legend' (id, 1985), un vulgar thriller con asesino en la que es una de sus peores películas, la olvidable 'La sombra del testigo' ('Someone to Watch Over Me', 1987) y un enérgico vehículo de tensión y acción llamado 'Black Rain' (id, 1989) que llevaba a Michael Douglas al Japón de los yakuzas.

La irregularidad que le habíamos observado en los ochenta no haría sino aumentar de cara a diez años en los que Scott casi tira su carrera por el inodoro. Y si 'Thelma & Louise' (id, 1991) se deja ver y tiene algún momento medio interesante, no se puede decir lo mismo de ese interminable filme que fue '1492: La conquista del paraiso' ('1492: The Conquest of Paradise', 1992), de la inane 'Tormenta Blanca' ('White Squall', 1996) o de ese panfleto militarista construido a mayor gloria de Demi Moore que fue 'La teniente O'Neill' ('G.I.Jane', 1997).

Necesitado pues de un revulsivo que le devolviera la gloria de antaño, Scott encaraba el comienzo de siglo de inmejorables formas, dando nuevos aires al peplum con una superproducción que sirvió a Russell Crowe para reclarmarle a la Academia el Oscar que no recibió por 'L.A.Confidential' (id, Curtis Hanson, 1997). El éxito de 'Gladiator' (id, 2000) propiciará una suerte de renacimiento de Scott, que se pondrá al frente de hasta ocho producciones en la primera década de esta nueva centuria de las que destacan por méritos propios la enérgica 'Black Hawk derribado' ('Black Hawk Down', 2001), la simpática 'Los impostores' ('Matchstick Men', 2003) y 'Red de mentiras' ('Body of Lies', 2008).

El resto, entre las que se encuentran chorradas como 'Un buen año' ('A Good Year', 2006) o equivocaciones como 'Hannibal' (id, 2001) o 'Robin Hood' (id, 2010) no podían, eso sí, ponernos sobre aviso para lo que se nos venía encima con 'Prometheus', anhelado regreso de Scott a la franquicia que él arrancó tres décadas antes que se convierte, por méritos propios, en uno de los peores filmes de su trayectoria, haciéndonos temer lo peor no ya de cara a su inevitable secuela, sino a esa pretendida continuación de 'Blade Runner' a la que hay que tenerle miedo, mucho miedo...

Los actores

De iguales modos a lo que pasaba hace unas semanas cuando comentábamos el reparto de lo último de Robert Redford, resulta más que evidente que los actores que intervienen en 'El consejero' están más allá de necesitar cualquier tipo de presentación que se les pueda hacer en estas líneas. Al frente de los cinco intérpretes que Scott ha elegido para su filme, un Michael Fassbender que no para, acumulando hasta ocho proyectos en cartera de cara al futuro inmediato y del que aún estamos a la espera de ver su intervención en la vitoreada '12 años de esclavitud' ('12 Years a Slave', Steve McQueen, 2013).

A su lado, dos féminas a cada cuál más bella, nuestra Penélope Cruz —que podría repetir para 'La reina de España' con el papel de Macarena de 'La niña de tus ojos' (id, Fernando Trueba, 1998)— y Cameron Díaz, se dejan acompañar por el marido de la primera y por un Brad Pitt que ahora mismo rueda a las órdenes de David Ayer un filme ambientado en la Segunda Guerra Mundial.