'Los Diminutos', Nostalgia TV

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Volvemos a los ochenta y a sintonizar nuestra venerada infancia televisiva en Nostalgia TV, la sección dominical que repasa los grandes hits de la niñez. Hoy le toca el turno a unos pequeños seres bondadosos que se ocultaban tras las paredes formando una sociedad alternativa a la humana. ‘Los Diminutos’ se colaron en TVE allá por 1986, y muchos creíamos que también lo hacían en nuestras casas. Quizás fuera porque por aquel entonces la televisión liberaba nuestra imaginación, en lugar de adormecerla.

Desde luego, a los ojos de un niño, nada podía ser más fascinante que un enigma como el de ‘Los Diminutos’. Pensadlo friamente: unos seres miniaturizados, una raza híbrida de humanoide y roedor, de origen desconocido (que jamás cuestionamos) cuya existencia no debía ser descubierta, cohabitando con nosotros sin que lo supiéramos. Y de repente, ese gran secreto, nos es revelado por un niño…

El origen de ‘Los Diminutos’

En su versión original, ‘The Littles’ animaron las mañanas de los sábados a los niños americanos entre 1983 y 1985, como resultado de la adaptación de la serie de novelas infantiles de John Peterson, que llevaban publicándose desde 1967. Lo cierto es que la idea dio para tres temporadas de aventuras y un total de 29 capítulos, emitidos en ABC, varias tv-movies e incluso una película, Here Comes The Littles (1985).

Quién sabe, tal vez descendieran de aquellos otros personajes inventados unos años antes por Mary Norton, The Borrowers. Lo cierto es que la serie, una producción de DiC Entertainment (Francia/USA/Canadá) tiene un largo historial de emisiones y reposiciones en USA (ha pasado por The Fammily Channel o Toon Disney, entre otras), y realizó un largo periplo por buena parte de Europa, emitiéndose también en países latinoamericanos, donde eran conocidos como ‘La Familia Meñique’. La serie también llegó hasta otros países como Brasil o Australia.

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Los Diminutos, no se dejan ver jamás. En las paredes de tu casa, sin que lo sepas algo pasa, pero seguro que no los verás

‘Los Diminutos’ se escondían tras las rejillas de ventilación de la casa de la familia Grande (los Bigg en el original), que conformaban una especie de entrada a otra dimensión. Lo realmente fascinante de estos dibujos era el propio secreto, que nunca debía ser revelado y en el que los niños queríamos creer ciegamente. Sólo Henry (Quique para nosotros) podía verlos, ya que los diminutos, por naturaleza, desconfían de los gigantes, a los que consideran una raza “egoísta y malévola”. No es de extrañar, pues como en toda buena serie infantil, no faltará el villano que trata de atraparlos, encarnado en los personajes del malvado Dr. Cepo y su ayudante. Su objetivo: llevarlos a su laboratorio para realizar experimentos científicos y probar su existencia.

Unos dibujos llenos de valores

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Las tramas de ‘Los Diminutos’ se centraban en las historias de una familia “convencional” de esta extraña raza, a lo sitcom, y su relación con el mundo exterior a través de la amistad entre los diminutos más pequeños, Tito y Lucy, y Quique, el preadolescente de la casa en cuyas entrañas habitan. Tito y Lucy tienden a meterse en líos como consecuencia de sus incursiones fuera de la rejilla, y los diminutos tendrán que enfrentarse juntos a los múltiples obstáculos que supone encararse al mundo desde su minúscula altura. Un gato o incluso una rata podían acabar con ellos de un sólo zarpazo.

Por eso, en sus aventuras con frecuencia vivían situaciones de grave peligron que vencían siempre juntos gracias al trabajo en equipoy a la lealtad. Como buena serie infantil, no podía estar exenta de su ración de moralina y de almíbar. El valor de la amistadse ensalzaba en cada capítulo, especialmente ilustrada con la relación entre Quique y los diminutos. Se trataba de transmitirnos el mensaje de que, aunque diferentes, podíamos entendernos y respetarnos. El mundo de los diminutos resultaba ser un espejo en el que los gigantes podían mirarse y aprender. El punto de humor lo aportaban el dúo cómico formado por los personajes del Abuelo cascarrabias y su patoso nieto Dinky, el aviador, enzarzados episodio tras episodio en alguna pelea, normalmente con persecución.

Una pequeña sociedad muy bien organizada

El mundo de ‘Los Diminutos’ está perfectamente organizado. Conscientes de las amenazas que pueden llegar desde el mundo exterior, cuentan con su propios cuerpos de defensa civil y de bomberos. Tienen incluso su propio periódico, el Grand Valley News. Son, además, una sociedad democrática: las decisiones importantes, que afectan a toda la comunidad, se consensuan en consejos y comités, y una Constitución legisla su vida en común. Pero su ley más sagrada es la que expresa que “ningún diminuto deberá revelar los secretos de su raza a los gigantes humanos”, por eso Quique y su tortuga Flecha, que hace las veces de mensajera entre ambos, serán los únicos a través de los cuales se relacionarán con el mundo exterior, más allá de las paredes de la casa de los Grande.

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Si hay algo que caracteriza a los Diminutos es su ingenio: sus casas, como las de los Borrowers (algo así como “los que toman prestado”), están llenas de objetos humanos reciclados para darles un nuevo uso: las puertas-peine, los sellos-cuadro, los dados-mesa, el sistema de megafonía hecho a base de pajitas que recorre toda la ciudad, el cartón de leche-ascensor… Hasta un botón podía hacer las veces de tren de aterrizaje de la avioneta de Dinky. Cualquier objeto humano es susceptible de tener una nueva vida en el mundo diminuto.

El mismo ingenio les permitía, como una versión mini de MacGyver, usar prácticamente cualquier cosa para escapar, trepar o, en definitiva, vencer cualquier peligro, defenderse o enfrentarse a un mundo descomunal. Toda esta creatividad la aplicaban también en una sección al final de cada episodio, “Pequeñas ideas para chicos grandes”. En ella, se adherían al movimiento anticonsumista D.I.Y. (‘Do it yourself’) y enseñaban cómo reaprovechar objetos de los gigantes para su pequeño mundo. Sin olvidar que vivían de okupas en las paredes de nuestras casas. Vamos, unos punks.

Ficha Técnica: Los Diminutos

Volvemos a los ochenta y a sintonizar nuestra venerada infancia televisiva en Nostalgia TV, la sección dominical que repasa los grandes hits de la niñez. Hoy le toca el turno a unos pequeños seres bondadosos que se ocultaban tras las paredes formando una sociedad alternativa a la humana. ‘Los Diminutos’ se colaron en TVE allá por 1986, y muchos creíamos que también lo hacían en nuestras casas. Quizás fuera porque por aquel entonces la televisión liberaba nuestra imaginación, en lugar de adormecerla.

Desde luego, a los ojos de un niño, nada podía ser más fascinante que un enigma como el de ‘Los Diminutos’. Pensadlo friamente: unos seres miniaturizados, una raza híbrida de humanoide y roedor, de origen desconocido (que jamás cuestionamos) cuya existencia no debía ser descubierta, cohabitando con nosotros sin que lo supiéramos. Y de repente, ese gran secreto, nos es revelado por un niño…

El origen de ‘Los Diminutos’

En su versión original, ‘The Littles’ animaron las mañanas de los sábados a los niños americanos entre 1983 y 1985, como resultado de la adaptación de la serie de novelas infantiles de John Peterson, que llevaban publicándose desde 1967. Lo cierto es que la idea dio para tres temporadas de aventuras y un total de 29 capítulos, emitidos en ABC, varias tv-movies e incluso una película, Here Comes The Littles (1985).

Quién sabe, tal vez descendieran de aquellos otros personajes inventados unos años antes por Mary Norton, The Borrowers. Lo cierto es que la serie, una producción de DiC Entertainment (Francia/USA/Canadá) tiene un largo historial de emisiones y reposiciones en USA (ha pasado por The Fammily Channel o Toon Disney, entre otras), y realizó un largo periplo por buena parte de Europa, emitiéndose también en países latinoamericanos, donde eran conocidos como ‘La Familia Meñique’. La serie también llegó hasta otros países como Brasil o Australia.

Los Diminutos, no se dejan ver jamás. En las paredes de tu casa, sin que lo sepas algo pasa, pero seguro que no los verás

‘Los Diminutos’ se escondían tras las rejillas de ventilación de la casa de la familia Grande (los Bigg en el original), que conformaban una especie de entrada a otra dimensión. Lo realmente fascinante de estos dibujos era el propio secreto, que nunca debía ser revelado y en el que los niños queríamos creer ciegamente. Sólo Henry (Quique para nosotros) podía verlos, ya que los diminutos, por naturaleza, desconfían de los gigantes, a los que consideran una raza “egoísta y malévola”. No es de extrañar, pues como en toda buena serie infantil, no faltará el villano que trata de atraparlos, encarnado en los personajes del malvado Dr. Cepo y su ayudante. Su objetivo: llevarlos a su laboratorio para realizar experimentos científicos y probar su existencia.

Unos dibujos llenos de valores

Las tramas de ‘Los Diminutos’ se centraban en las historias de una familia “convencional” de esta extraña raza, a lo sitcom, y su relación con el mundo exterior a través de la amistad entre los diminutos más pequeños, Tito y Lucy, y Quique, el preadolescente de la casa en cuyas entrañas habitan. Tito y Lucy tienden a meterse en líos como consecuencia de sus incursiones fuera de la rejilla, y los diminutos tendrán que enfrentarse juntos a los múltiples obstáculos que supone encararse al mundo desde su minúscula altura. Un gato o incluso una rata podían acabar con ellos de un sólo zarpazo.

Por eso, en sus aventuras con frecuencia vivían situaciones de grave peligron que vencían siempre juntos gracias al trabajo en equipoy a la lealtad. Como buena serie infantil, no podía estar exenta de su ración de moralina y de almíbar. El valor de la amistadse ensalzaba en cada capítulo, especialmente ilustrada con la relación entre Quique y los diminutos. Se trataba de transmitirnos el mensaje de que, aunque diferentes, podíamos entendernos y respetarnos. El mundo de los diminutos resultaba ser un espejo en el que los gigantes podían mirarse y aprender. El punto de humor lo aportaban el dúo cómico formado por los personajes del Abuelo cascarrabias y su patoso nieto Dinky, el aviador, enzarzados episodio tras episodio en alguna pelea, normalmente con persecución.

Una pequeña sociedad muy bien organizada

El mundo de ‘Los Diminutos’ está perfectamente organizado. Conscientes de las amenazas que pueden llegar desde el mundo exterior, cuentan con su propios cuerpos de defensa civil y de bomberos. Tienen incluso su propio periódico, el Grand Valley News. Son, además, una sociedad democrática: las decisiones importantes, que afectan a toda la comunidad, se consensuan en consejos y comités, y una Constitución legisla su vida en común. Pero su ley más sagrada es la que expresa que “ningún diminuto deberá revelar los secretos de su raza a los gigantes humanos”, por eso Quique y su tortuga Flecha, que hace las veces de mensajera entre ambos, serán los únicos a través de los cuales se relacionarán con el mundo exterior, más allá de las paredes de la casa de los Grande.

Si hay algo que caracteriza a los Diminutos es su ingenio: sus casas, como las de los Borrowers (algo así como “los que toman prestado”), están llenas de objetos humanos reciclados para darles un nuevo uso: las puertas-peine, los sellos-cuadro, los dados-mesa, el sistema de megafonía hecho a base de pajitas que recorre toda la ciudad, el cartón de leche-ascensor… Hasta un botón podía hacer las veces de tren de aterrizaje de la avioneta de Dinky. Cualquier objeto humano es susceptible de tener una nueva vida en el mundo diminuto.

El mismo ingenio les permitía, como una versión mini de MacGyver, usar prácticamente cualquier cosa para escapar, trepar o, en definitiva, vencer cualquier peligro, defenderse o enfrentarse a un mundo descomunal. Toda esta creatividad la aplicaban también en una sección al final de cada episodio, “Pequeñas ideas para chicos grandes”. En ella, se adherían al movimiento anticonsumista D.I.Y. (‘Do it yourself’) y enseñaban cómo reaprovechar objetos de los gigantes para su pequeño mundo. Sin olvidar que vivían de okupas en las paredes de nuestras casas. Vamos, unos punks.

El origen de ‘Los Diminutos’

  • Título Original: The Littles
  • Género: Animación
  • Cadena: ABC
  • Emitida en España: TVE
  • Disponibilidad DVD: Todas las temporadas

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  • Título Original: The Littles

  • Género: Animación

  • Cadena: ABC

  • Emitida en España: TVE

  • Disponibilidad DVD: Todas las temporadas


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