Disculpen que me salga un poquito del tema cine y me meta en la televisión e incluso que me inmiscuya en el trabajo de mi compañera Teresa, quien esta semana está cubriendo la programación televisiva, pero es que no puedo evitar anunciar que esta noche se emite en Cuatro, a las diez menos cinco, un capítulo de ‘House’ ganador de un Emmy al mejor guión de serie dramática. El episodio en cuestión se titula ‘Tres historias’ y está lleno de virguerías de estructura que harán las delicias de los ya fans de la serie y sorprenderán a aquellos que opinan que resulta muy repetitiva. Por si fuera poco, habrá una atractiva artista invitada: Carmen Electra. ‘House’ está producida por Bryan Singer, director de ‘Sospechosos habituales’ y ‘X-Men’, quien además dirigió el capítulo piloto. Habitualmente, los episodios se presentan como los de C. S. I.: se ve a una persona vivir su vida normal hasta que le ocurre algo que denota que está enferma. A partir de aquí, comienza la investigación. Las enfermedades más obvias se descartan y nadie del equipo médico es capaz de determinar por qué el paciente sigue sin mostrar mejoría. A veces, House envía a sus chicos a registrar la casa en busca de drogas o de indicios de conductas que le puedan haber llevado a enfermarse. A veces, sonsaca a pacientes y familiares con malas artes. Otras veces, una casualidad le hace darse cuenta de lo que no podía ver hasta ese momento. Entonces, resuelve el misterio y salva a la persona de una muerte segura. Mientras tanto, vemos a House atender una clínica, donde los pacientes sirven de alivio cómico y sobrarse con propios y extraños. El esquema es siempre el mismo, sí, pero no es necesariamente repetitiva. Y el capítulo 21 ni siquiera se parece en cuanto a esquema a lo que he resumido.
Aparte de esta intriga científica, lo que más destaca de la serie son las contestaciones despectivas y bordes que el doctor protagonista dirige a sus pacientes, sus jefes, compañeros, subordinados, a los familiares de los pacientes y a todo el que se le ponga por delante. El actor, Hugh Laurie, también estuvo nominado al premio Emmy. Laurie tuvo su primer gran éxito en ‘Jeeves y Wooster’, adaptación para televisión de las novelas y los relatos de P. G. Woodehouse, junto al genial Stephen Fry, con quien ya había actuado en ‘Los amigos de Peter’, de Kenneth Branagh, además de compartir un show de sketches titulado ‘A bit of Fry and Laurie’ en 1986.
Se puede ver un vídeo de avance del capítulo 21.
Como curiosidad diré que, al parecer, Huhg Laurie pidió que saliera Carmen Electra en la serie porque uno de sus hijos es muy fan de la ex-vigilante de la playa. Ella le dedicó un autógrafo. Luego, Laurie apareció en 'El Programa de Ellen Degeneres' (ya sabéis, la de la serie 'Ellen') y ella le regaló una guitarra, autografiada por Electra, para el chaval, que parece que también es muy aficionado a tocar la guitarra. Ahora el hijo de Hugh Laurie podrá tocar el instrumento mientras piensa en Carmen Electra.
