Pedro Masó, prácticamente una leyenda en nuestra cinematografía, falleció a los 81 años de edad. Director de 14 películas, productor de 82, y guionista de otras 146, siempre supo andar en consonancia con los gustos del público patrio, al que complació durante décadas. Películas como la maravillosa 'Atraco a las tres' (de su secuela mejor nos olvidamos), series como 'Anillos de oro' (acabo de retroceder a mi infancia en un santiamén), o sus aportaciones a la saga de 'La gran familia' (¡¡¡Chenchoooooo!!!!) hablan por sí solas.
Masó (que recibió un tardío Goya honorífico en el 2005) siempre se lamentó y se quejó de lo mal que le trató la crítica durante años, cosa que no me extraña si tenemos en cuenta pestiños como 'Puente aéreo' o sus guiones y producciones de productos al servicio de Paco Martínez Soria. Y es que con una carrera tan prolífica como la de Masó, hubiera sido un milagro que todo en lo que metió la mano fuera bueno. Yo me quedo con lo antes mencionado, que no por casualidad forma parte de lo mejorcito del cine español, y cuyo recuerdo es ya un pedazo de la memoria colectiva nacional.
Masó echaba pestes del cine actual acusando a muchos de haber dado la espalda al público, y perderse en intelectualizarlo todo. Nunca se cansó de defender a gente como Garci, Saura, Armendáriz, Amenábar, Almodóvar y Santiago Segura. Hoy la 1 de TVE le homenajea de la peor forma posible. ¿Tanto costaba emitir una de sus mejores obras?
Hasta siempre, Pedro.
Vía | Las Horas Perdidas