Woody Allen ha concedido una entrevista a la revista brasileña Istoé en la que se queja "amargamente" de no poder competir con las grandes productoras a la hora de poder tener bien amarrado a un actor-actriz para sus películas. ¿Es que ya no basta con el deseo de hacer una película con un buen director? ¿Ya no existe aquello de bajar el caché para poder rodar bajo sus órdenes? Quiero pensar que sí. Quizá son los deseos específicos del director los que no encuentran la deseada respuesta.Así se rompe con el mito Allen = película de bajo presupuesto, por lo menos de lo que se desprende de sus palabras. Su deseo es poder hacer muchas más cosas en sus films con los medios técnicos actuales.
En lo que se refiere a su nueva producción cinematográfica, Allen acaba de estrenar en USA Melinda&Melinda, cinta protagonizada por Will Ferrell y Rhada Mitchell. Y como próximo se nos anuncia Match point que como curiosidad hay que decir que es la primera que rueda en Londres, y va de londinenses en su ciudad (como de neoyorkinos en New York).
A Woody Allen le está pasando con los presupuestos cómo en una de sus películas ("Sueños de seductor"): antes para ligar sólo había que hacer como Bogart, silbar. Ahora cuesta un poco más.
