El actor de treinta y siete años, Guillaume Depardieu, hijo de Gérard Depardieu, falleció el lunes en el hospital Raymond Poincare de la región de París de una neumonía que había contraído días atrás. El actor había sido repatriado el domingo a Francia desde Rumanía, donde contrajo una enfermedad pulmonar mientras rodaba el thriller 'L'Enfance d'Icare' (la infancia de Ícaro), de Alex Iordachescu, donde tenía el papel protagonista de Jonathan Vogel. Depardieu fue trasladado al hospital a toda prisa la noche del domingo al lunes.
Sus estrenos más recientes habían sido 'Versailles', 'De la Guerre' y 'Les Apprentis' (1995), por la que obtuvo un Cesar al actor novel más prometedor.
Guillaume Depardieu, que quería ser estrella de rock y que acabó de rebote como actor, había pasado por los tribunales, había tenido problemas con las drogas y el alcohol, y tuvo un turbulento viaje al Festival de Cine de Gijón de 1999. Guillaume publicó una biografía, 'Darlo todo', en la que describía a Gérard Depardieu como un borracho mentiroso que sólo idolatra el dinero, que se había negado a divorciarse de su madre, la actriz y psicóloga Elizabeth Guignot, durante 14 años por motivos económicos. "Lo quiero y lo detesto por las mismas razones. Por su manera de huir de la vida, y al mismo tiempo pelear todo el tiempo contra ella". En teoría se habían reconciliado en 2003 con el rodaje de 'Aime ton père' (amarás a tu padre).
Gérard "lo amaba infinitamente. Era un tipo maravilloso, un actor inmenso", dijo Alain Corneau, que dirigió a padre e hijo en la película de 1991'Todas las mañanas del mundo' ('Tous les Matins du Monde').
Pero antes de eso, Gérard había declarado "Cuando vino al mundo, sentí que coronaba una cima, y que sabía por primera vez hacia dónde me dirigía". Pues pronto dejó en la cuneta a su hijo. "Reconozco que levanté la mano contra Guillaume, que provocaba en mí cóleras homéricas. Él era incontrolable. ¿Cómo reaccionaría usted si su propio hijo le amenazase con un cuchillo?".
En 2000 se casó con Élise Ventre, una actriz que también sufrió su descenso a los infiernos y con quien tuvo una hija. Pilar Punzano, compañera de reparto en 'Amor, curiosidad, Prozak y dudas', le definía como "majete". "Es igual que el Principito. No tiene filtros, como los niños. Sí muchas cicatrices, por fuera y por dentro. Y una visión excepcional para el cine".
Quedan películas suyas pendientes de estreno: 'Stella', 'Circuit fermé' y su participación en 'Men Don't Lie' ya no será posible.
Vía | El País