En junio pasado les comentamos que Hollywood se preparaba para la huelga. No para una, sino para tres potenciales huelgas: de escritores —cuyos contrato colectivo se venció el primero de noviembre pasado—, de directores y de actores, cuyos contratos se vencen el 30 de junio del próximo año.
Los grandes estudios estaban apurando sus cronogramas y haciendo énfasis en la compra de guiones terminados, en vez de encargar proyectos. Los rodajes de muchas películas se habían adelantado, como el de la nueva versión de Martes 13, o la preproducción de La Reina del Sur.
Hoy, a las 12:01 am., comenzó la primera, convocada por el sindicato de escritores The Writers Guild of America. Como su lema lo indica, se trata de una huelga de lápices caidos. En el transcurso del día, comenzarán a apostarse piquetes a las puertas de los grandes estudios, cadenas de TV y productoras estadounidenses, principalmente en las costas Este y Oeste. Aunque se espera que los 12 mil miembros del sindicato se sumen a la huelga, también hay escritores a los que no le hace gracia alguna sumarse a un piquete.
Así se lo explicó un escritor a Variety:
Esta es un potencial asesino de relaciones y es un exabrupto del sindicato forzarme a formar parte de un piquete contra quienes han hecho tanto por mi carrera.
Pero no sólo los escritores piqueteros estarán en situaciones difíciles. Serán acaso quienes cumplan el doble rol de escritores y productores, escritores y directores o escritores y actores, quienes se las verán más amargas, pues el sindicato les ha pedido no desempeñar ninguno de los dos roles.
La televisión será la más afectada, habida cuenta de que la gran mayoría de los productos que se emiten, son programas que requieren de un guión —guiones que son reescritos una y otra vez antes y durante el rodaje: desde seriados, hasta TV movies, pasando por los exitosos show nocturnos de variadades, como el de David Letterman o Jay Leno. Pero aunque los estudios han tomado previsiones y los afectos de esta huelga repercutirán con mayor fuerza en la televisión, es precisamente esto lo que más afectará a la industria del cine. Porque, se preguntan muchos, sin Leno, ni Letterman y sus pares, ¿dónde se publicitarán las nuevas películas?
Según Variety, esto obligará a los estudios a invertir más en los métodos tradicionales de promoción.
Por otro lado, hablando de las relaciones entre la industria cinematográfica y la TV: ¿estarán listos los guiones de la próxima edición del Oscar, en caso de que la huelga se extiende por largos meses, como ocurrió en 1988?
Los beneficios residuales han sido la piedra de tranca en la conversaciones entre la AMPTP (la organización que agrupa a los grandes estudios y productoras) y la WGA. Por beneficios residuales se entiende aquellos beneficios generados cuando sus obras se muestran de nuevo en la TV o son distribuidas en DVD. Según el guionista John August, esos cheques trimestrales son los que pagan las hipotecas y los que mantienen a los escritores a flote, hablando en términos económicos.
Primero, la unión de escritores pide aumentar el beneficio recibido por concepto de ventas de DVD, una tasa establecida dos décadas atrás que poco o nada tiene que ver con la situación actual, en la que el DVD se ha convertido en el formato más popular de distribución y exhibición.
Segundo, tomando como el ejemplo el caso del DVD, los escritores buscan establecer tasas de beneficios por concepto de descargas de Internet —previendo que este tipo de distribución eventualmente suplante al DVD— y demás tipos de exhibición electrónica. La AMPTP alega que la distribución electrónica aún está en pañales y sólo es para fines estrictamente de promoción.
Muchos, como nuestro colega Antonio Toca, ven en la huelga una oportunidad única para probar otro tipo de cine. De hecho, es el cine independiente estadounidense lo que acaso más partido pueda sacar de esta coyuntura.
El caso es que los escritores sindicalizados se han ido a la huelga, aunque, después de ver cosas como 300 o Transformers, más de uno se hará la misma pregunta:
¿...Y es que no lo estaban ya?
Vía | Variety | The Hollywood Reporter | IndieWire | John August Blog
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