David Fincher ha lanzado una oferta para adquirir los derechos de la novela de Jason Starr, ‘Panic Attack’ («ataque de pánico»). Ted Griffin, guionista de ‘Ocean’s Eleven’, se encargará de la adaptación y no se ha comunicado aún si Fincher dirigirá la película resultante o únicamente la producirá.
Como tal, la noticia me deja muy fría, especialmente si nos remontamos a la película de Fincher que más concomitancias puede tener con ésta y no solo por la palabra común en el título: ‘Panic Room’ —Fincher ha creado la productora Panic Pictures para todo esto—. Lo cierto es que el argumento del libro no parece original ni tampoco rico en posibles exploraciones psicológicas. Sin embargo, las críticas que se han lanzado sobre la obra de Starr son muy favorables.
La historia de ‘Panick Attack’ nos sitúa en el momento en el que dos ladrones se disponen a allanar el hogar de un eminente psiquiatra y su familia, quienes parecen tenerlo todo. El hombre de la casa dispara un cargador entero contra uno de los intrusos, que muere mientras su cómplice huye. Para sorpresa del esposo, padre y profesional triunfador, los medios de comunicación lo vilipendian y lo tachan de justiciero enloquecido por usar las 10 balas que cargaba su pistola, en vez de aclamarlo como un héroe por defender a su mujer y a su hija. El ladrón que había logrado escapar es un guapo sociópata que elige a la esposa y a la joven —quien acaba de volver tras graduarse en Vassar y ahora está preocupada por su futuro— como objetivos de una diabólica venganza que puede ser más sangrienta que el primer ataque frustrado.
Se dice que Starr cuenta esta historia en clave de humor negro y que combina a la perfección el humor y el suspense, lo cual para mí ya supone un primer estímulo. Comentan que el autor logra una auto-parodia de los comportamientos de los neoyorquinos y que el retrato de los personajes principales es hábil y detallado, además de hecho con sarcasmo, ya que cada uno tiene su particular debilidad. Otros confiesan que la han encontrado «retorcida en el buen sentido de la palabra» y que está cargada de tensión.
Fincher, mientras tanto, tiene las manos llenas, pues no le faltan proyectos en los que se podría centrar, como ‘Captain Nemo’ o ‘Cleopatra’, con Angelina Jolie, y ‘House of Cards’ y ‘Mindhunter’, para televisión. Podría incluso continuar con la trilogía de Larsson y seguir con ‘The Girl Who Played With Fire’, después de ‘Millennium: los hombres que no amaban a las mujeres’.
Vía | Boomtron