Lo que son las cosas. En el siglo XXI, señoras y señores, en países democráticos y supuestamente avanzados. Resulta que hay muchas personas, en Estados Unidos y en España que creen que los carteles de 'Zack and Miri make a porno' y 'Diario de una ninfómana' deben ser censurados. El sexo vende, el sexo escandaliza, el sexo es el demonio.
Sigo sin dar crédito a todo este asunto. Dejando a un lado lo de Estados Unidos y Kevin Smith, me pregunto qué ha ocurrido con la película de Christian Molina en nuestro país. Expresiones como "dudosa legalidad", "gratuitamente provocativa" y "razones morales" han sido las respuestas que han dado algunas empresas para no incluir la publicidad de 'Diario de una ninfómana'.
¿Os acordáis del cartel de 'Tirante el Blanco'? Es muy parecido y no sufrió ningún boicot. Más aún, en la calle hay anuncios de lencería tan provocativos como la imagen de ese póster y no pasa absolutamente nada. Y ya no hablemos de lo que hay en televisión a horas en que toda la familia puede estar sentada frente a ella. No pasa nada. Pongamos sangre y violencia. No pasa nada. Sale una tetilla... ¡peligro, borrad eso, fuera!
Abajo tenéis los carteles que han provocado la polémica. Ejem, espero que no os escandalicéis con las imágenes, ejem...
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Vía | Despiertos, Tublogdecine y Cineando