Aviso de spoilers: En el texto se comentan algunos detalles de la trama revelados en el marketing de la película. Si prefieres llegar a ciegas, quizás no sigas leyendo.
Ya va quedando menos para el estreno de 'Trap'. La última marcianada del siempre sorprendente M. Night Shyamalan tiene una de las premisas del año. Con el giro ya desvelado desde los tráilers del padre de familia que es a la vez un asesino en serie atrapado en un concierto.
Shyamalan se merece mucho reconocimiento por esta idea que él mismo ha descrito como "'El silencio de los corderos' en un concierto de Taylor Swift", pero la premisa original está inspirada en una historia real igualmente inaudita. Se trató de una operación policial encubierta llamada Operation Flagship y que se realizó en 1985.
Todo el mundo quiere cosas gratis
La operación fue un esfuerzo conjunto entre el Servicio de Marshals de Estados Unidos y la policía de Washington que acabó con la detención de 101 fugitivos. Y parte de una iniciativa mayor llamada Fugitive Investigative Strike Team (FIST), una serie de nueve operaciones realizadas en los ochenta con las que se pretendía abordar la captura de miles de fugitivos de la ley que había en el país.
Operation Flagship fue una de las operaciones más efectivas y artificiosas (y divertidas en retrospectiva) de todas las realizadas. Se dejaron invitaciones en el correo a 3.000 fugitivos, que les prometían haber ganado dos tickets para uno de los partidos de fútbol americano más esperados de la temporada, y debían ir a recogerlos a un evento especial de brunch en el estadio.
De los invitados, 101 fugitivos picaron el anzuelo y se presentaron en el estadio, fueron recibidos por 166 policías y alguaciles, todos de incógnito y camuflados de trabajadores del estadio, administrativos, organizadores, miembros de seguridad o cheerleaders. Todos ellos fueron llevando a los fugitivos a estancias donde los agrupaban en grupos pequeños y los iban arrestando.
La operación fue todo un éxito para el departamento, con dos de los principales implicados: Louie McKinney y Stacia Hylton, pasando a convertirse en directores de los alguaciles como resultado. En el estadio McKinney había interpretado al "maestro de ceremonias" y Hylton a una de las "cheerleaders".
Otras de las operaciones incluyeron crear una aerolínea ficticia y atraerlos diciendo que habían ganado un viaje gratis, o llamadas anunciándoles que habían ganado la lotería. La trama de 'Trap' podría perfectamente ser una de estas, salvo que en este caso Josh Harnett será el único tratando de huir de la ley. La película se estrena el 9 de agosto.
Imagen: NFL
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