Pocos cineastas en activo transmiten dosis tan altas de sabiduría cada vez que abren la boca como Guillermo del Toro. El tres veces ganador del Oscar, dos por 'La forma del agua' y una más por su 'Pinocho' —ambas magníficas— ha vuelto a abordar el controvertido tema de la inteligencia artificial durante una charla interesantísima en el British Film Institute y, como de costumbre, queda claro que está en el lado correcto de la historia.
Tan lúcido como de costumbre
El mexicano teorizó sobre temas tan complejos como el valor del arte y la emoción inherente al componente humano en la creación artística, y lo hizo con una concisión tan envidiable como habitual en sus discursos. Sin ir más lejos, Del Toro arrancó asegurando que lo único que ha conseguido hacer hasta ahora la IA es "salvapantallas medianamente convincentes".
"La IA ha demostrado que puede hacer salvapantallas medianamente convincentes. Básicamente es eso. El valor del arte no es cuánto cuesta y el poco esfuerzo que necesitó para crearse, es cuánto riesgo supone estar en su presencia".
Ahora bien. A pesar de que el valor del arte no se encuentre en su precio de venta al público, la comercialización es inevitable y abre un debate muy interesante sobre cuánto estaríamos dispuestos a pagar por creaciones artificiales. Aquí es donde la emoción se alza como un elemento tan diferencial como la mano humana y las experiencias que el actor proyecta sobre su obra.
"¿Cuánto va a pagar la gente por esos salvapantallas? ¿Les van a hacer llorar porque han perdido un hijo o una madre? ¿Porque han malgastado su juventud? No, joder".
Por el momento, la gran revolución de la IA generativa se ha quedado en una fábrica de memes y en un arma a prueba de dedos y dientes para intentar colar bulos en campañas electorales entre publicación bochornosa y publicación bochornosa. El arte, por el momento, se la dejamos a los artistas.
Ver 2 comentarios